El aeropuerto de la ciudad Kazán, en Rusia, acaba de ser el escenario en el que se llevó a cabo la persecución de vehículo más bizarra de la historia.
Un conductor borracho se metió a las instalaciones y comenzó a recorrer la terminal luego de haber sido arrinconado por los oficiales de policía en las pistas de aterrizaje; en ese momento, en lugar de bajarse del vehículo, el hombre decidió cruzar las puertas de seguridad y meterse a las instalaciones, con todo y automóvil.
Ya dentro del aeropuerto, el vehículo pasó frente a los mostradores de facturación, las cintas de recogida de equipaje, las tiendas Duty Free y hasta las puertas de embarque.
Fue hasta que el conductor perdió el control del volante que los policías, que lo perseguían a pie durante la odisea, lograron arrestarlo.
Por fortuna y casi de milagro, ninguna persona resultó lesionada, aunque los daños materiales ascienden a 135 mil dólares, aproximadamente.
Pareciera una escena sacada de una película de comedia. (YOUTUBE)