El mundo del futbol está de luto por la inesperada muerte en un accidente aéreo de la mayoría de los jugadores del Chapecoense, que hasta hace sólo unos meses era un pequeño equipo brasileño y que viajaba a Colombia para jugar su final soñada por la Copa Sudamericana.
Pasada la media noche del lunes y cuando se respiraba la final de la Copa Sudamericana, la Aeronáutica Civil (Aerocivil) de Colombia informó que una aeronave procedente de Bolivia de la empresa Lamia se accidentó en el Cerro El Gordo, en cercanías al municipio de La Unión, Antioquia, con 72 pasajeros y 9 tripulantes a bordo.
Tan pronto se supo de la nefasta noticia comenzaron las reacciones de federaciones, clubes, jugadores, exjugadores y hasta de mandatarios que exaltaron el nombre de esa pequeña institución, que pasó a la historia por una inesperada cita con el destino.
"Existen amigos de toda una vida que estaban en ese vuelo (...) vivíamos en armonía y alegría muy grandes. Antes de embarcar, ellos decían que iban en busca de volver ese sueño realidad. Y el sueño acabó esta madrugada", señaló el presidente del Consejo Deliberativo del Chapecoense, Plinio Davis de Nes Filho.
El presidente de Brasil, Michel Temer, quien decretó tres días de luto oficial, expresó su "solidaridad" con los jugadores del Chapecoense y de la misma manera su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, dijo que el país está de luto por la tragedia.
El estadio londinense de Wembley iluminó ayer por la noche de color verde su icónico arco en memoria de los afectados por el trágico accidente.
El estadio de Anfield (Liverpool) y el KCOM Stadium (Hull) guardaron un sentido minuto de silencio antes de los partidos de cuartos de final de la Copa de la Liga (EFL Cup) en memoria de las víctimas.
Tragedia. Los equipos de rescate realizan labores en el lugar del accidente aéreo ocurrido en el municipio de La Ceja, departamento de Antioquia, Colombia. Según la Policía Nacional de Colombia, se estima que al menos 72 personas murieron.
