La flexibilidad representa la capacidad de un individuo o un objeto para ser doblado con facilidad, la condición de plegarse según la voluntad de otros y la susceptibilidad de adaptarse a los cambios de acuerdo a las circunstancias. En nuestro mundo actual, la verdad se va construyendo en el momento, hasta el punto en que deja de serlo y exige un nuevo planteamiento. De esto se trata el ser flexibles.
Cuando mentalmente somos flexibles, entonces consideramos que todo es posible, ya que si ello no es así, entonces nos estamos sujetando a la rigidez de algún parámetro que en determinado momento -tarde o temprano- se quebrará, y junto con él, se quebrará todo lo que esté a su alrededor.
Cuando somos flexibles, desarrollamos procesos mentales con la premisa de que existen muchas soluciones posibles para cada circunstancia probable. Esta elasticidad de pensamiento facilita el que las acciones se adapten más rápidamente a la realidad. Los materiales y las estructuras más sólidos que existen en el Universo no son rígidos, son flexibles. La flexibilidad aporta una garantía de resistencia muy superior a la rigidez.
Acerca de la necesidad de ser flexibles Sun Tzu afirma: "El agua cambia de curso de acuerdo con los contornos de la tierra. El soldado prepara su victoria de acuerdo con la situación del enemigo".
Con respecto a la tela de araña, se están haciendo investigaciones para encontrar la forma de producir artificialmente un material como éste. Hasta hoy solamente se ha conseguido replicar el 10% de las características de esta maravilla. La tela de araña tiene un espesor de unas cuantas micras -una micra es la millonésima parte de un metro- y soporta todo el peso de la araña y de sus víctimas, es absolutamente flexible y de rápida construcción; se instala en cualquier lugar que la araña determine y se utiliza para todos los fines que le conviene. ¡Así debe ser el pensamiento flexible!
Los directores generales de grandes empresas (Horacio Barbeito de Walmart, Ramiro Otaño de Moët Hennesy, Enrique Alemañy, de Ford, entre otros), coinciden en afirmar que una característica que debe resaltar en la relación entre empleadores y empleados es la flexibilidad.Esta flexibilidad abarca desde la preocupación por hacer que el empleado tenga horarios menos rígidos hasta la comprensión que debe mostrar muchas veces el trabajador a la hora de entender que hay cosas que, por la propia naturaleza del negocio, no se pueden cambiar.
Por otra parte, ya no se trata de que las ideas geniales salgan de los departamentos especializados en investigación y desarrollo, sino que la puerta de la innovación también está abierta para que cualquier empleado aporte lo que le parece que puede ser novedoso para el negocio.
Claro que hablar de comodidad en el horario, cercanía del lugar de trabajo y apertura respecto de nuevas ideas parece algo muy ambicioso si tomamos en cuenta que una gran parte de la población trabaja en la informalidad, donde ninguna de esas pautas son prioridad. Por eso para poder hablar de mayor flexibilidad y mejores condiciones laborales, también es necesario que el Estado promueva la formalidad.
La flexibilidad de las empresas se ha convertido en uno de los principales factores de éxito para aquellos negocios que quieran posicionarse bien en el mercado. En el estudio hecho por Allied Consultants Europe y la consultora de negocios Improven se determinó que las empresas europeas de mayor éxito, de acuerdo a sus indicadores clave de rendimiento, también son las organizaciones más flexibles.
Las organizaciones altamente flexibles fomentan e intercambian ideas con socios externos en un 96% comparado con el 43% de las empresas menos ágiles; regularmente hablan sobre las tendencias y las fuerzas del mercado (89% contra 29%) y se centran más en crear flexibilidad para apoyar nuevas oportunidades para el éxito futuro (65% contra 15%).
Las empresas europeas entienden perfectamente la importancia que tiene la flexibilidad de la organización para su negocio y la actitud futura ante el crecimiento y la rentabilidad. El 72% de las empresas participantes en el estudio hacen esfuerzos serios por aumentar la flexibilidad en su organización.
La flexibilidad aporta mucho al éxito personal: "Para tener éxito en la vida tienen que recordar tan sólo tres cosas. En primer lugar, saber lo qué quieren; tener una idea clara de qué meta quieren alcanzar en cada situación. En segundo lugar, estar alerta y mantener los sentidos abiertos de forma que se den cuenta de lo que están obteniendo. En tercer lugar, tener la flexibilidad de ir cambiando su forma de actuar hasta que obtengan lo que querían" John Grinder, co-creador de la Programación Neuro Lingüística.
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