En el partido de la semana uno, Giants derrotó 20-19 a Cowboys. Es la única derrota que ha sufrido Dallas en la temporada. Una victoria de Cowboys les daría el título de su división. (Archivo)
En Dallas ya se empieza a hablar de Super Bowl. Es lógico tener tanta confianza luego de igualar la marca del equipo con 11 triunfos consecutivos. Pero la noche de hoy, los Cowboys deben preservar la cautela al visitar al último equipo que los derrotó: los Giants de Nueva York.
Los Giants perdieron el momento y una buena oportunidad de mantener el paso luego de que la semana pasada cayeran en Pittsburgh para sufrir su primer revés en siete partidos. Pero eso no los hace menos peligrosos, especialmente ante los Cowboys. Ocho de los últimos 10 enfrentamientos entre ellos se han decidido por siete puntos o menos.
El mariscal de campo Dak Prescott y el corredor Ezekiel Elliott, los novatos que tienen a los Cowboys en la cima de la liga, deben tener cuentas pendientes ante el equipo que les propinó su única derrota como profesionales. En el triunfo de 20-19 de la primera fecha, los Giants tomaron la ventaja a mediados del último cuarto y la defensiva secó al entonces inexperto ataque de los Cowboys, limitando a Elliott a menos de tres yardas por acarreo, el único equipo capaz de contener al potente corredor.
"Creo que definitivamente me ayudó a convertirme en el jugador que soy actualmente, tener algo que probar desde el inicio de campaña, salir al campo y recomponer el camino", declaró el jueves Elliott.
Desde entonces, los Cowboys han concretado cuatro remontadas para ganar el encuentro en el último cuarto. En los últimos cinco partidos, Prescott tiene 10 touchdowns sin intercepciones y la defensiva no ha permitido más de 17 puntos en siete partidos esta campaña. Un triunfo les asegura el título del Este de la NFC.
"Ellos representan la única mancha en nuestro récord", dijo Prescott. "Nos entusiasma la oportunidad de poder visitarles para ajustar cuentas tras lo que ellos nos hicieron en el primer partido".
DUELO CLAVE PARA GB
Para Aaron Rodgers, no hay mejor lugar que el hogar. Especialmente cuando llega diciembre y Lambeau Field se convierte en una tundra. Rodgers tiene 14 triunfos consecutivos como local durante el último mes de campaña regular. Eso representa malas noticias para unos Seahawks de Seattle que vienen de perder a un miembro fundamental de la mejor defensiva de la NFL, el safety Earl Thomas.
Desde que llegó a NFL, Rodgers tiene marca de 2-3 ante los Seahawks incluyendo la postemporada. Y no es sorpresa que cada uno haya defendido de manera perfecta su casa. Pero los Packers de 2016 han pecado de inconsistentes. Un equipo que inició la campaña con etiqueta de protagonista y cuyo camino a postemporada se ha visto obstaculizado por sus irregularidades. Lo mismo son capaces de encadenar cuatro partidos encajando al menos 31 puntos, que permiten 26 totales en sus últimos dos partidos.
Los Seahawks tampoco son un ejemplo de constancia, pueden ir a Nueva Inglaterra a imponerse de manera enfática a los Patriots o visitar Tampa Bay y anotar cinco puntos. Seattle encabeza la NFL con 16,2 puntos permitidos en promedio. Su ofensiva tiene tres juegos en la campaña en los que no ha conseguido un touchdown y dos en los que ha conseguido al menos 37 tantos. La única certeza de los Seahawks es que un triunfo combinado con una derrota de Arizona les asegura el Oeste de la NFC.
Lo difícil será conseguirla en Green Bay, en donde totalizan 40 puntos en sus últimas tres visitas, o la misma cantidad que le anotaron la semana pasada a los Panthers.
Giants activa a Vereen
Los Giants de Nueva York activaron al corredor Shane Vereen para el partido contra los Cowboys de Dallas.
Vereen ha estado fuera de acción debido a que se rompió el tríceps en la tercera semana de la campaña, pero regresó a los entrenamientos la semana pasada.
El equipo liberó al jugador de línea Adam Gettis para dejar sitio en la lista.
Vereen participó el jueves en su primera práctica protegida desde que se sometió a cirugía.
Cowboys informó ayer que Whitehead quedó descartado, aunque no dieron a conocer qué regla había violado.
Whitehead se ha desempeñado como el regresador titular de patadas de despeje y de regreso.