Con el motín registrado ayer en el penal de Topo Chico en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, que dejó un saldo de 49 reos muertos, creció el temor entre los empresarios laguneros por el traslado de los reos acusados de secuestro al Cefereso de Gómez Palacio.
"Eso es precisamente un ejemplo de lo que puede suceder aquí en el Cefereso de Gómez Palacio, sabemos que hay mucha seguridad; el de Topo Chico, por ejemplo, es un penal viejo, pero sabemos que en las cuestiones internas, se mueven mafias, se mueven grupos que hay sociedades dentro de los Ceferesos y puede ocasionar un problema", comentó Eugenio Treviño, presidente de Canacintra Torreón.
Explicó que al tener concentrados a reos de un mismo delito, se convierte en una "universidad del delito".