El delantero portugués del Real Madrid Cristiano Ronaldo celebra el gol marcado ante el Alavés. (EFE)
Cristiano Ronaldo marcó un triplete ayer y el Real Madrid remontó para golear 4-1 en cancha del Alavés y asegurarse una semana más el liderato de la liga española, escoltado por el Barcelona, que derrotó por 1-0 al Granada.
Los madrileños cuentan 24 unidades por la décima fecha y los azulgranas 22 por delante del tercer clasificado Atlético de Madrid, vencedor 4-2 sobre el Málaga para rebasar en la clasificación al Sevilla, con los mismos 21 puntos tras empatar 1-1 con Sporting de Gijón.
En el estadio Camp Nou, el uruguayo Luis Suárez levantó la Bota de Oro al máximo goleador de las ligas europeas la pasada campaña, pero fue Rafinha (48) quien anotó su quinta diana liguera y le dio el triunfo al Barsa ante el colista Granada.
"No ha sido partido brillante por nuestra parte. Nos faltó finura y nos costó, pero la victoria no peligró", consideró el timonel, Luis Enrique.
Yannick Carrasco (7 y 86) y Kevin Gameiro (24 y 44) marcaron sendos dobletes por el Atlético, que se sobrepuso a la expulsión de Stefan Savic (60) y los tantos de Sandro Ramírez (31) e Ignacio Camacho (64) por el undécimo clasificado Málaga.
Entre semana, Cristiano fue blanco de las críticas por exceso de individualismo. Frente al Alavés, el astro portugués respondió con tres dianas -una de penal- que anularon el tanto inicial del brasileño Deyverson (7) por el equipo que dirige el argentino Mauricio Pellegrino.
Pero la fiesta no fue completa para el goleador, quien falló otra pena máxima a los 78, y tampoco para el Madrid, que encajó gol por noveno partido seguido.
"Cristiano estaba enfadado porque vive de los goles", expuso el lateral madridista Marcelo.
Si Cristiano celebró su tercer, cuarto y quinto gol liguero, Alvaro Morata (84) salió desde la banca y añadió también el tercero de su cuenta particular para tumbar al recién ascendido Alavés, que clasifica momentáneamente 13ro con 10 puntos.
La afición local vistió de gala el estadio vitoriano ante el regreso del Madrid 11 años después, y la fiesta empezó con gol de Deyverson, quien penalizó la lentitud de la defensa "merengue".
Al Madrid le bastó el empuje de Cristiano para voltear el marcador antes del descanso. El portugués forzó una falta cerca del área que derivó en penal por mano de Deyverson, y lo transformó sin apuros.
Nivelado el marcador, Cristiano fue por el segundo y lo encontró con un derechazo lejano desviado por la defensa.
La segunda mitad fue pareja a la primera, con un primer arreón del Alavés y gran intervención del costarricense Keylor Navas, antes de que Cristiano provocara un nuevo penal fallado por él mismo.
Morata subió el tercero con un globo al primer toque tras balonazo de Marcelo. Pero la tarde era de Cristiano, insaciable perseguidor del "hat-trick", que consiguió tras combinar con el brasileño y fusilar sin piedad al arquero.
"Tiene paciencia y lo está demostrando en el campo", valoró el técnico, Zinedine Zidane. "Fue muy bueno en todos los aspectos. Estoy muy contento con su actuación".
Tras una primera mitad de lo más insulsa en que el Granada se aplicó en defensa, el Barsa logró abrir la lata con un gol de carambola de Rafinha, quien alargó una jugada del argentino Lionel Messi hacia Neymar y remató de volea el rechace del poste y la zaga visitante.
Suárez estuvo poco acertado, Messi menos participativo, y Neymar tampoco supo embocar un buen centro de Sergi Roberto, el mejor del partido para los locales, que gestionaron con cautela el marcador favorable ante un rival cuya principal baza fue la buena actuación del arquero mexicano Guillermo Ochoa.
El Atlético no tardó en avanzarse a un inestable Málaga, y Carrasco cruzó de zurdas una profundización de Antoine Griezmann, tan valioso de goleador como asistente.
El Sevilla de Jorge Sampaoli bajó dos puestos al cuarto lugar.