El Sindicato percibe en la SEP cierta debilidad, lo que lo pone en posición de poder exigir cambios a la Reforma Educativa.
Legisladores, académicos e integrantes de la sociedad civil exigieron a la SEP sumar voces al diálogo que inició ayer con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
"Nos parece que considerar al SNTE como un actor privilegiado de la reforma es un grave error estratégico del secretario Aurelio Nuño y del Gobierno federal", consideró David Calderón, director de la organización civil Mexicanos Primero. El panista Juan Carlos Romero Hicks, presidente de la Comisión de Educación del Senado, señaló que las autoridades sólo dialogan con el SNTE bajo la premisa de que tiene la representación legal del magisterio, pero, dijo, eso debe cambiar.
"Eso no pude ser así porque el SNTE tiene más de 60 secciones y se debe tener espacio de diálogo con otras expresiones del magisterio", planteó.
Jorge Javier Romero, investigador de la UAM, opinó que el Sindicato percibe en la SEP cierta debilidad, lo que lo pone en posición de poder exigir cambios a la Reforma Educativa. "Es lo mismo que hizo Elba Esther Gordillo en 1992, cuando dijo: 'Muy bonita su reforma, pero déjenme controlarla a mí'. Por eso fracasó la descentralización educativa", sostuvo.
Ayer se llevó a cabo la primera reunión, a puerta cerrada, del diálogo entre la SEP y el SNTE en las instalaciones de la dependencia federal. Javier Treviño, subsecretario de Educación Básica, explicó que se trató de un primer acercamiento para revisar los señalamientos planteados por el Sindicato y que, en esta primera fase, sólo se contempla un diálogo con ellos. "Por ahora, es una colaboración entre el Sindicato y la Secretaría. Habrá distintos momentos de colaboración", aseguró.
BUSCAN SOLUCIONES
La Junta de Gobierno del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) manifiestó su preocupación por el momento crítico que vive el país y por algunas de las expresiones del magisterio nacional, en sus diversas vertientes y organizaciones, respecto de la evaluación docente.
Es por ello que en la búsqueda de soluciones al conflicto, cada parte, la SEP, las autoridades educativas locales, los docentes, sus organizaciones y expresiones sindicales, y el INEE, debe asumir su responsabilidad en lo que les corresponde, a fin de que la Reforma Educativa repercuta en una mejor calidad de los aprendizajes de todos los niños y jóvenes.