Foto: Archivo Siglo Nuevo
Un extracto de la cúrcuma, especia utilizada en la gastronomía india y que da su característico color amarillo al curry, puede matar células cancerosas según algunos estudios realizados en Reino Unido.
El curry es una mezcla basada en diferentes especias que se utilizan en la India (masala), para guisos o estofados con salsa y generalmente se utiliza esa palabra para nombrar a los platos preparados con esa salsa. Una de sus características más reconocidas es su intenso color amarillo, el cual se debe a uno de sus componentes: la cúrcuma, una planta perenne que se cultiva principalmente desde la Polinesia hasta el sudeste asiático y cuyo mayor centro de producción es Sagli, una ciudad del sur de la India.
Los componentes químicos más importante de la cúrcuma son un grupo de compuestos llamados curcuminoides, que incluyen la curcumina (diferuloymethane), demetoxicurcumina y bisdemetoxicurcumina, de los cuales el más estudiado es la curcumina.
La curcumina es precisamente el compuesto responsable de su coloración anaranjada y ha sido muy estudiada por su carácter anticancerígeno, antiséptico y antinflamatorio.
Algunos estudios epidemiológicos atribuyen el bajo índice de cáncer de colon en la India al alto consumo de cúrcuma como parte de su dieta y se ha observado también que en ese país la incidencia de cáncer de mama es hasta un 30 por ciento menor que en países de Occidente.
Diversos estudios han confirmado su actividad inhibidora de vías de señalización como STAT3 y NFkB, encargadas de traducir las señales extracelulares en expresión de diferentes genes que controlan la proliferación celular, respuesta al sistema inmune y muerte celular entre otros. NFkB, por ejemplo, se ve activada en situaciones de estrés celular, exposición a radiación UV e hipoxia (como la producida por el consumo de tabaco). Una de los principales efectos antinflamatorios de la cúrcuma es la inhibición de la liberación de citoquinas proinflamatorias.
INVESTIGACIÓN
Los científicos han descubierto que la curcumina provoca la muerte de células cancerosas. Durante mucho tiempo se ha pensado que la curcumina, tiene poderes curativos y ya se le ha probado como tratamiento para la artritis y la demencia.
Algunos estudios, como el que fue llevado a cabo en el Centro de Investigación de Cáncer, en Cork, Irlanda (2009) muestran que la sustancia logró destruir en el laboratorio células cancerosas del esófago.
Los expertos afirman que el hallazgo -publicado en la British Journal of Cancer (Revista Británica de Cáncer) podría ayudar en la búsqueda de nuevos tratamientos contra la enfermedad.
En el estudio los científicos trataron a células del esófago cancerosas con curcumina y descubrieron que el compuesto comenzó a matar a las células a las 24 horas del "tratamiento". Las células, según explicó la doctora Sharon McKenna, quien estuvo a cargo de la investigación, comenzaron a devorarse entre sí después de que la curcumina comenzó a producir señales letales para destruir a las células.
"Se ha sabido durante mucho tiempo que los compuestos naturales tienen el potencial de tratar a células defectuosas que se han vuelto cancerosas y sospechamos que la curcumina podría tener un valor terapéutico", dijo la cienífica.
Estos resultados son muy interesantes porque sugieren que en el futuro se podrían desarrollar compuestos de curcumina como un potencial fármaco anticanceroso para tratar el cáncer del esófago.
UNA PREOCUPACIÓN QUE CRECE
EL cáncer de esófago es la séptima causa más común de muerte por cáncer. Se calcula que menos de 20 por ciento de la gente que sufre esta enfermedad sobrevive después de cinco años. Esto se debe a que sólo se logra diagnosticar en sus primeras etapas en cerca de 20 por ciento de los casos.
Gerald O´Sullivan, director del Centro de Investigación de Cáncer de Cork, señala que la incidencia de esta enfermedad en el mundo occidental ha aumentado en más de 50 por ciento desde los años setenta.
Y añadió que se cree que el aumento de casos de cáncer de esófago podría estar vinculado al aumento en las tasas de obesidad, consumo de alcohol y la enfermedad del reflujo gastroesofágico. De tal forma que encontrar formas de tratar y prevenir este padecimiento es extremadamente importante.
OTROS EFECTOS FAVORABLES
Por otra parte, se cree que la cúrcuma también tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
La cúrcuma se ha usado durante siglos en la medicina china e india para tratar trastornos inflamatorios, y algunos de sus componentes se utilizan en suplementos dietéticos en países occidentales.
No es la primera vez que se estudian las posibles propiedades beneficiosas de este compuesto.
En 2009, un estudio en Estados Unidos reveló que el compuesto podría prevenir la propagación en el cerebro de las placas amiloideas que se cree causan la enfermedad de Alzheimer.
Los científicos afirman que actualmente se está investigando si consumir curry puede ayudar a prevenir la enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia.
Otros estudios también han hablado de otras propiedades beneficiosas de la cúrcuma, como sus efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
Los expertos señalan, sin embargo, que hasta ahora todas las teorías sobre el impacto de la curcumina han sido sólo probadas en el laboratorio o en animales, de modo que hace falta llevar a cabo muchas más investigaciones para comprobar los resultados en seres humanos.
