Deja gran ejemplo a hijos y compañeros

Con el último pase de lista y el sonar de las sirenas de las patrullas, la mañana de ayer lunes en la explanada principal de la Policía Municipal de Gómez Palacio, los compañeros, amigos y familiares despidieron al oficial José Guillermo Sáenz Ibarra, quien a pesar de no estar en labores, murió en cumplimiento de su deber al enfrentarse a dos asaltantes en la colonia Los Álamos de Gómez Palacio, durante el fin de semana.

"Memo", como le decían sus compañeros, de 33 años de edad, con poco más de un año y medio como agente activo en la corporación policial, era un joven, alegre, sonriente y de grandes valores; quien hace un mes y medio se había convertido en padre por tercera ocasión.

Fue la tarde del sábado que acudió a la tienda de nombre "Las Flores", a comprar algunos artículos para su esposa, quien se encontraba en casa incapacitada y cuidando a su pequeño, cuando ocurrieron los hechos en los que perdió la vida.

Guillermo era amante de la música en inglés y algunos de los recuerdos que dejó a sus conocidos, es su gusto por cantar a todas horas; además de ser amante de los postres, sin embargo a decir de sus "hermanos" policías, lo que más amaba en la vida era a su "chaparra", su "campeona", su "princesa" y a su recién nacido Leónidas.

Ésta no fue la primera ocasión en que sus reflejos de policía salían a pesar de estar "franco" (de descanso), ya que anteriormente, rescató a una de su vecinas de su casa, la cual se incendiaba, ya que el tanque de gas había explotado, además, en otra ocasión al estar disfrutando en familia de un día en el campo, arriesgó su vida al rescatar a un joven que se estaba ahogando en el río. Dejando un gran ejemplo de servicio a sus compañeros.

Con lágrimas en los ojos y un "nudo" en la garganta, dentro del homenaje póstumo, los agentes se despidieron de él diciendo "¡Presente!" al escuchar su nombre en el pase de lista y encendiendo las sirenas de sus unidades.

Con las unidades llenas de arreglos florales, en un ambiente lleno de nostalgia y solidaridad hacia su esposa y familia, el cortejo fúnebre partió alrededor de las 9:00 de la mañana de las instalaciones de Seguridad Pública rumbo al panteón municipal.

Guillermo Sáenz

Agente municipal que murió en cumplimiento de su deber:

⇒ Murió a los 33 años.

⇒ Le sobreviven tres hijos, uno de ellos recién nacido.

⇒ Se desempeñó año y medio en la corporación.