El tenista argentino Juan Martín del Potro tuvo dos años de ausencia en el US Open debido a una lesión en su muñeca. (AP)
Juan Martín Del Potro tiene un dilema: quiere voltearle la página a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, pero no se puede.
Menos de tres semanas después de su impactante conquista de la medalla olímpica de plata, Del Potro volvió al ruedo y lo hizo con una victoria 6-4, 6-4, 7-6 (3) ante su compatriota Diego Schwartzman.
Sin brillar en demasía, salió airoso de su debut en el primer Abierto de Estados Unidos que disputa desde 2013. Su acumulado de errores no forzados fue superior al de su rival, 48 contra 38.
"Lo mejor que pasó es que gané", dijo Del Potro. "Todavía me cuesta terminar de creer todo lo que viví en Río. Todavía estoy cansado. No me pude recuperar tras Río porque tuve que hacer tantas cosas en mi país, también en mi ciudad".
Aparte de su vestimenta con un amarillo neón, el argentino de 27 años atrae la atención y es querido en Flushing Meadows: "El público me hace sentir especial aquí".
La "Torre de Tandil" se perdió las últimas dos ediciones del torneo debido a tres cirugías en la muñeca izquierda. Situado en el puesto 142 del ranking, recibió una invitación para entrar directamente al cuadro principal del último Grand Slam de la temporada y en el que se consagró campeón en 2009.
Pero la plata en Río confirmó que es un tenista con todas las condiciones para pelear títulos. Desde junio, se ha anotado victorias contra tres de los cinco primeros de la clasificación.
Y en su primer partido tras sucumbir ante Andy Murray en una extenuante final olímpica de cuatro sets, Del Potro capitalizó cinco de ocho bolas de quiebre y supo imponer su jerarquía ante un adversario que nunca ha superado la segunda ronda en un Grand Slam.
Del Potro mencionó la derrota el lunes de Mónica Puig, la puertorriqueña que ganó la medalla de oro en el tenis femenino, al resaltar lo arduo que es volver a otra competencia tras el frenesí de una impactante victoria.
Se trata de un factor que perdió con su prolongado alejamiento del circuito. "Cuando vives tantas emociones fuertes es difícil a reencontrarse con uno mismo y salir por otro objetivo", resaltó. "Tuve la suerte de ganar, pero necesito jugar mucho mejor que hoy y sobre todo sentir mi físico de nuevo para poder responder de nuevo.
Temerosos de su potente derecho, los rivales le exigen la izquierda. Schwartzman apeló a ese recurso. Aún cauteloso con su muñeca, Del Potro se defiende con un revés cortado y también exhibió buenas condiciones en sus subidas a la red, donde ganó 13 de 19 puntos.
"Pegarle de slice le ayuda porque es un golpe que complica mucho en esta superficie", comentó Schwartzman. "Pero erra muy poco de ese lado. Aunque no le pega máximo como antes, erra muy poco".
En la siguiente ronda, se medirá con Steve Johnson, que remontó dos sets en contra para doblegar a Evgeny Donskoy.
HORAS
Y 38 minutos duró el partido entre los argentinos Del Potro y Schwartzman.