Defensa. Gente de El Parralito busca un amparo contra la reubicación y denuncian amenazas. (ARCHIVO)
Los comerciantes de El Parralito desmienten una vez más la versión del regidor del Ayuntamiento de Gómez Palacio, Mario Ortega Bermúdez y aseguran que no se han reunido con las autoridades para hablar sobre el tema de la reubicación que se hará para completar el par vial 20 de Noviembre-Santiago Lavín.
Un grupo de comerciantes dieron a conocer el día de ayer, que luego de manifestar ante este medio su inconformidad, han sido presionados e incluso recibieron amenazas de las autoridades municipales.
Por otra parte, negaron que sean solamente dos las personas que se niegan a esta reubicación como lo señala el regidor, ya que se contaba con una lista de firmas de 36 personas en desacuerdo, la cual se redujo a 23 luego de las mencionadas amenazas.
Por otra parte, los inconformes señalaron que se encuentran asesorados legalmente y que el abogado que los apoya en el caso, interpondrá un recurso de amparo a favor de los comerciantes de este conocido tianguis gomezpalatino.
Señalaron que su representante legal, afirmó que hay posibilidades de conseguir un amparo en este caso, el cual podría beneficiarlos hasta por un año.
"Ellos dicen que tuvieron una reunión con nosotros los comerciantes y que incluso estuvimos de acuerdo con el planteamiento que ellos hicieron, pero nosotros nunca tuvimos una reunión con ellos y luego los invitamos a que vinieran el sábado a escuchar nuestras inquietudes y no se presentaron", indicaron los inconformes.
Comentaron que únicamente acudieron el pasado miércoles los regidores, pero que no se encontraban más que los dos comerciantes que señalaron el día de ayer que son quienes están rentando los puestos y que aseguran que son los únicos en desacuerdo.
Unos de los afectados, indicó que no han realizado ninguna acción indebida ni piensan hacerlo, por lo que no hay motivo para que los estén tratando de amedrentar por medio de amenazas, "únicamente estamos defendiendo nuestras fuentes de trabajo y la estabilidad de las mismas, porque tenemos aquí toda una vida y no queremos que se ponga en riesgo nuestro trabajo".
Por otra parte, destacaron que los mismos comerciantes establecidos de las calles en las que los quieren reubicar, tampoco están de acuerdo porque podría afectarles en sus ventas en su espacio.