La escultura data del siglo XVIII. (INTERNET)
Un turista brasileño destruyó una escultura que data de hace más de 300 años al intentar tomar una fotografía en el Museo Nacional de Arte Antiguo de Lisboa.
Se trataba de una escultura de San Miguel del siglo XVIII. El subdirector del museo, Jose Alberto Seabra Carvalho, ha expresado: “Llevo muchos años trabajando en el museo y no recuerdo que nunca haya pasado nada similar”.
La fotografía de la escultura hecha pedazos fue tomada por Nuno Miguel Rodrigues, que estaba ahí cuando el accidente ocurrió. La imagen se hizo viral en las redes en sólo días.
La historia contaba que el turista intentaba sacarse una ‘selfie’ con la estatua cuando la derrumbó, aunque otras versiones de testigos aseguran que el hombre en realidad trataba sacarle una foto a otra cosa cuando, al hacerse para atrás, derribó la antigua escultura.
El personal del museo ahora trabaja por restaurar la pieza, algo que dicen será difícil, pero no imposible.

