Son deliciosos en cualquier ocasión.
Primera parte
Hoy en día, nuestra cultura avanza a pasos agigantados en todos los ámbitos, y en todas direcciones, y en el mundo gastronómico más. Cada país define su cocina como la mejor y la más variada, sobre todo en cocinas como las que son más competitivas. Hay quienes prefieren la italiana, otros la japonesa, otros la francesa o la española y todos adoramos la mexicana. Ahora están de moda la peruana, la colombiana y las más exóticas.
Pero, ¿has notado que la alimentación es distinta en cada región? No nos referimos a los sabores, sino al conjunto tan especial de cada civilización y el ritual que ha hecho alrededor de uno de los mayores placeres del ser humano: comer.
Comer es un instinto, una necesidad primordial de ser humano para sobrevivir, algo que no es opcional, pues de la alimentación la sola supervivencia sin importar sabores, texturas ni temperaturas. La carne de grandes bestias como el mamut, era consumida en estado casi natural e incluso la dentadura de nuestros antepasados era anatómicamente distinta para poder masticarla.
De los antiguos egipcios dejaron plasmados sus testimonios alimenticios, comían pan, cerveza, pescado, carne de oveja, cerdo y aves, y las vacas estaban reservadas para ocasiones especiales, todo iba acompañado de verduras y frutas exóticas. Una de sus grandes aportaciones fue la creación de postres y pasteles a base de pasas y miel de abeja. El vino estaba reservado para los ricos. Los egipcios antiguos descubrieron la fermentación del pan después de un accidentado olvido de masas en las cocinas.
En la antigua Grecia, era frugal, pero fueron los primeros en establecer tres tiempos: el desayuno, el almuerzo y la cena, también a ellos les debemos el empezar a comer con una especie de cubiertos, se comía con los dedos y una especie de cuchillo y una herramienta cóncava similar a la cuchara. Los griegos comían sentados en recipientes hechos de terracota o metal.
Los romanos, por el contrario, marcarían una nueva era en la gastronomía, se vieron influenciados por los griegos y después al convertirse en un imperio, por todas las otras civilizaciones que conquistaron. Su desayuno incluía huevos, queso miel, leche y fruta. En el almuerzo, comían las sobras de la cena anterior que consistía en panes, carnes, pescado y mariscos. Al instaurarse la república, la comida se servía en tres tiempos: la entrada, el plato fuerte y el postre. Es importante notar que estas tres culturas comparten elementos muy especiales a la hora de comer, como las mesas, el aceite de oliva y en especial el trigo. A partir de ellas, se derivan las bases de la cocina internacional que es usada en todo el mundo. Pero muy lejos de ahí, los orientales también establecían sus propios estilos... continuará.
Pan crujiente de trigo
Ingredientes
- 1 kilo de harina
- 2 sobres de levadura (tradi pan) o 22 gramos de levadura de otra marca.
- 50 gramos de azúcar
- 10 gramos de sal
- 100 gramos de manteca vegetal
- Agua c/s
Preparación:
En un bol, se coloca toda la harina, se le mezcla, la sal, el azúcar y la manteca, sin dejar grumos
Se le añade la levadura a 200 ml. de agua tibia y se bate con un tenedor, cuando aumente de tamaño se añade a la harina poco a poco, se va amasando hasta que quede una masa suave.
Se tapa con un trapo y se deja reposar una hora.
Se vuelve amasar un poco y se hacen bolitas de 150 gramos cada una y se aplasta, se deja leudar 20 minutos más y se meten al horno a 175 grados por 20 o 30 minutos.
Contenido NutrimentalPor cada 100 g.:
Energía: 245 kcal.
Proteínas: 18.00 g.
Grasas: 09.00 g.
Colesterol: 0.006 g.
Fibra bruta: 6.00 g.
Me despido de Los sabores de Fiore, Cocinando con historia, y como siempre, les deseo un buen provecho. La comida se disfruta aún más junto a una buena compañía.
duranflorencia@gmail.com
