El magnate no dejó de prometer la construcción de un muro fronterizo que los mismos mexicanos pagarían; un endurecimiento de la política migratoria y el reformar los tratados comerciales entre ambas naciones. (ARCHIVO)
Relacionar a la República Mexicana con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, sin duda resulta polémico para muchos por lo duro de sus propuestas y las declaraciones que hizo sobre este país mientras se encontraba en campaña.
Y es que durante esa temporada, el magnate no dejó de prometer la construcción de un muro fronterizo que los mismos mexicanos pagarían; un endurecimiento de la política migratoria y el reformar los tratados comerciales entre ambas naciones, tal y como recuerda Animal Político.
MURO FRONTERIZO
Respecto al muro, señaló que sería levantado en la frontera entre México y Estados Unidos, y pese a que tras la reunión que sostuvo con el presidente Enrique Peña Nieto, el mandatario mexicano aseguró que este no se construiría y que mucho menos el país pagaría por el, Trump insistió inmediatamente en que la idea seguía en pie y que se haría con un pago único de entre cinco y diez mil millones de dólares, afirmando incluso que el recurso podría ser obtenido reteniendo las remesas.
Todo esto, según recuerda la agencia de noticias EFE, debido a que el magnate consideró, tal y como lo demuestran sus declaraciones en junio pasado, que “cuando México envía su gente (a Estados Unidos), no están enviando lo mejor… ellos están enviando a gente con un montón de problemas, y ellos nos traen esos problemas. Están trayendo drogas. Están trayendo crimen. Son violadores".

POLÍTICA MIGRATORIA
Aunque no se refirió sólo a los migrantes de México, sino a todos en general, el presidente electo dijo durante el tercer debate que sostuvo con quien fuera su rival, Hillary Clinton, que en Estados Unidos había muchos "bad hombres", lo que precisamente medios como la BBC ligaron inmediatamente al repudio del magnate hacia los inmigrantes.
En específico sobre los mexicanos, el republicano aseguró que impondría aranceles comerciales y cancelarías las visas a turistas o empresarios, pues aseguró que “la inmigración es un privilegio, no un derecho”.
Finalmente, en este sentido, rechazó la posibilidad de una amnistía para los once millones de indocumentados de diferentes nacionalidades que hay en Estados Unidos, y advirtió que sólo con someterse a un nuevo proceso que su administración estipularía, se lograría obtener la ciudadanía.

ADVERTENCIAS COMERCIALES
En el plano económico y comercial, Trump dejó en claro también sus políticas proteccionistas, pues prometió que favorecería a las empresas que regresaran sus fábricas a Estados Unidos y dejaran de invertir en países como México o China, ya que, según él, su país ha perdido más de siete millones de empleos desde 1979 por esta situación.
Aseguró también que establecería impuestos de hasta 35 por ciento a los bienes de consumo que México exporta a Estados Unidos.
Y, para rematar, se comprometió a revisar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el TLCAN, que calificó como uno de los peores suscritos por Estados Unidos.
Condicionó su permanencia a que México aceptara una renegociación y estableció, tal y como rememora CNN, que nunca firmaría "ningún acuerdo comercial que perjudique a nuestros trabajadores o que disminuya nuestra libertad e independencia. Voy a llegar a acuerdos individuales con distintos países. Entiéndalo Estados Unidos es primero”.
LA VISITA A MÉXICO
Es necesario señalar también cuando el empresario fue invitado por el gobierno mexicano a este país, lo que trajo consigo una oleada de críticas de parte del sector opositor.
En plena tormenta, el presidente Enrique Peña Nieto afirmó que durante la reunión en Los Pinos con Donald Trump, sí le dijo que los mexicanos no construirán el muro que el candidato presidencial republicano proponía.
"Al inicio de la conversación con Donald Trump dejé claro que México no pagará por el muro. A partir de ahí, la conversación abordó otros temas y se desarrolló de manera respetuosa", señaló Peña Nieto.
No obstante, el republicano desmintió al mandatario mexicano inmediatamente, pues en una larga entrevista con la cadena televisiva ABC, negó que en la reunión que sostuvieron en Los Pinos, Peña le haya dicho que México no pagaría por el muro.
"Oh, él no dijo eso (que México no pagaría). Él (Peña Nieto) tuiteó eso mucho tiempo después de que la reunión hubiera terminado. El hecho es que él no dijo eso. Él tuiteó después de que me fui", enfatizó Trump.
Sobre su visita al país, el magnate inmobiliario la calificó como un éxito tremendo y añadió que logró entenderse muy bien con el presidente Peña Nieto a pesar de la polémica en torno a su propuesta de un muro fronterizo.
"A mí me agradó mucho (el presidente Peña Nieto) y me llevo muy bien con el presidente. Muy, muy bien. Pienso que tendremos una gran relación, pero México pagará por el muro", concluyó.

CUESTIONA LA SEGURIDAD NACIONAL
Para concluir, cabe recordar también cuando el republicano perdió con México el negocio del torneo de golf de la PGA que era realizado en uno de sus hoteles en Miami, Florida, el cual se anunció que mudaba su sede al Club de Golf Chapultepec, para realizarse en 2017.
Trump fue entrevistado por Fox News y no titubeó en declarar irónicamente sobre la resolución del torneo que: “Se lo van a llevar a Ciudad de México y, a propósito, espero que tengan seguros contra los secuestros”, frase que se suma a todas las duras y polémicas aquí mencionadas y que mantienen en vilo a gran parte de la República, en espera de qué tipo de presidente será el magnate.