El apoyo que recibió el pequeño Elías Pérez de parte de un benefactor anónimo, se extendió hacia otros niños que así lo requieren.
Y es que la cama, el respirador, oxímetro de pulso y todo el equipo que le permitió pasar sus últimos días en casa, fue donado al Hospital Infantil Universitario de Torreón.
La entrega formal la realizó Javier Quintero, fundador de Donadores Laguna, medio por el que el benefactor de nombre Gerardo, hizo posible la compra del equipo y el que ordenó las modificaciones necesarias en su vivienda para trasladar al pequeño Elías, quien durante 17 días disfrutó a su familia en su casa.
Elías, de ocho años de edad, falleció la madrugada del viernes ocho de abril. Pero su recuerdo quedará en la donación que se realizó el día de ayer.
Se trata de una cama de hospital, un respirador mecánico y uno portátil cuyo valor oscila entre los 10 mil dólares, y cuya adquisición corrió a cargo del benefactor.
"Es un donativo importante, es un material costoso, que en algunas ocasiones tenemos que adquirirlo por medio del hospital y estamos muy limitados para hacerlo, simplemente para poder adquirir un respirador tenemos que buscar varias cotizaciones, empezar a pedir apoyos aquí y allá. El material es una gran ayuda", dijo Patricia Ann Smith Gámiz, subdirectora de Enseñanza del Hospital Infantil.
De acuerdo con Javier Quintero, se acordó con los padres de Elías, Carlos Pérez y Sandra Velázquez, que el equipo quedaría bajo resguardo de Donadores Laguna,
"Yo decidí aquí por la situación de que no es gubernamental y los apoyos que recibe el Hospital Infantil es de la sociedad en general, que es un hospital que atiende niños, y siempre se ha sabido que la prioridad de Donadores Laguna en apoyo a pacientes es a niños", comentó Quintero.
Para el fundador de la asociación sin fines de lucro, era imposible guardar el equipo en una bodega, ya que uno de los principales lemas que se ha tenido es "pongamos a trabajar lo que se hizo para ayudar".
Asimismo, dijo que "se queda en buenas manos, sin duda que todo se utilizará para lo mejor de los niños y bueno también se donó fuerte cantidad de medicamentos controlados".
Una vez más, Javier Quintero comentó, "Elías pone un precedente, queda vivo dentro de la sociedad lagunera, con Elías vimos como se humanizó la Clínica 16, como la gente se fraternizó y esperamos no volver a ver un caso de un niño que tenga que vivir 5 años por cuestiones administrativas en un hospital cuando se pueden hacer las cosa con voluntad".
Donación. Javier Quintero entregó el equipo que utilizó Elías en casa, al Hospital Infantil. (GUADALUPE MIRANDA)