El analgésico de los atletas
Constantemente buscamos superarnos, y en el deporte no es la excepción. Los records están para romperse, es por ello que los atletas evolucionan de la mano de la tecnología. Sin embargo, en la búsqueda del primer lugar se puede llegar a los límites donde se genere un desgaste importante, o en su defecto, una lesión. De tal modo que el masaje deportivo es un buen método para contrarrestar el cansancio, al mismo tiempo que se cuida al deportista. El profesor Ramón Hernández, especialista en el área fisioterapeuta, advierte los riesgos.
En ese sentido, esta práctica consiste en una serie de maniobras las cuales son llevadas a cabo para la preparación de los tejidos, esto se usa tanto para prevenir lesiones como para aumentar el tiempo de recuperación de las mismas.
Los diferentes tipos
Los deportistas generalmente buscan el clásico masaje: el precompetitivo o de calentamiento, el cual se brinda generalmente quince minutos antes de la actividad física, que busca aumentar la temperatura y activar rápidamente la circulación sanguínea para que los deportistas se preparen de la mejor manera y logren un buen desempeño.
En contraste, el masaje poscompetitivo se realiza dentro los primeros treinta minutos luego de finalizar la actividad, y tiene como objetivo optimizar el rendimiento muscular a través de la difusión del ácido láctico al sistema linfático. Existe un tercer tipo, que es poco común debido a que se brinda a lo largo del evento deportivo, el masaje de mantenimiento. Éste, busca principalmente mantener en las mejores condiciones al participante para que su productividad no decaiga.
Como consecuencia, les ayuda a los atletas mediante la liberación de toxinas, ácido úrico y ácido láctico a través del sistema linfático, por lo que los músculos tendrán mayor disponibilidad de oxígeno, necesario para un buen funcionamiento. Además del aporte terapéutico, el masaje deportivo genera confianza y seguridad en el jugador, elementos importantes a la hora de competir.
¿Cuándo usarlo?
Resulta relevante, recomendar que este ejercicio se brinde solamente cuando haya presencia de fatiga muscular, alguna contractura o simple agotamiento.
Por ningún motivo haga uso del masaje deportivo cuando presente inflamación, fractura, várices o alta presión, puesto que la manipulación de esta actividad acelera el ritmo cardiaco, y con ello crece la probabilidad de problemas de circulación.
El alto rendimiento deportivo que buscan todos los atletas, por lo tanto, está vinculada a los logros que consigan o que puedan conseguir los deportistas y el medio ideal son estos masajes.
El profesor Ramón Hernández afirma que los atletas deben tomar cuando menos una sesión por semana de este masaje para prevenir lesiones que pongan en riesgo su trayectoria.
"El deportista debe tomar mínimo una vez a la semana su masaje deportivo, y considerarlo como una parte del entrenamiento”.
Profesor Ramón Hernández,
Especialista en masajes