El camino hacia el arte

El contenido de una obra de arte es una inmensa ventana que puede mostrar aspectos profundos con respecto a la historia, influencias en el pensamiento y que no se limita únicamente a los aspectos propios del autor ya que traspasan hacia la forma de organización en la que han sido creadas dichas formas artísticas.

Es por ello resaltar la función que cumplen al trasmitir la ideología predominante o sean empleadas como medios para promover nuevas formas pensamiento, todo esto desde la reflexión del autor, quien dirige la obra a un público que pueda comprender mediante el lenguaje que emplee el mensaje que está impreso en la obra, más allá del contenido estético.

El proceso en el que se mezcla la ideología con las formas de expresión y la creación plástica pasa desapercibido principalmente porque incluye al autor en su forma de ver el mundo, las relaciones y la valoración de las cosas. A pesar de esto es un proceso complejo y que tiene un impacto relevante porque forma parte de la vida cotidiana y que no es algo nuevo o producto de la era actual, por el contrario ha acompañado el desarrollo de la humanidad fortaleciendo la forma de organización y pensamiento.

Tomemos por ejemplo la obra realizada en el Neoclásico, la cual pretende retomar antiguos ideales del pasado greco-rromano la idea era clara restaurar el esplendor de una cultura.

Una gran cantidad de pinturas de esta época se ha realizado en grandes formatos que recuerdan heroicas hazañas, en el que su protagonista se aprecia de gran tamaño y con una actitud triunfante, es sencillamente relacionado con el poder y el dominio.

Transmite la idea de estar frente a alguien de suma importancia y por tanto cuando se trate al respecto de esa figura la posición que se tomará se verá influenciada por la información visual que hemos recibido con anterioridad. El personaje por excelencia para representar lo antes mencionado es Napoleón, cuyo pintor Jaques Louis David, trabajó con maestría la forma de mostrar la figura emblemática del militar francés.

Sin embargo, la transmisión de ideas mediante elementos visuales no se ha quedado en el pasado como medio de enseñanza o instrucción. Ha tomado un lugar en la producción gráfica para seguir transmitiendo formas de pensar a diferentes partes del mundo.

Este fenómeno es descrito por Ludovico Silva en "Teoría y práctica de la ideología" en el cual le dedica un capítulo al uso de los comics en la difusión del imperialismo sobre los países latinoamericanos. La manera en que opera es simple se presentan mensajes relacionados con la supremacía del capitalismo los cuales quedan en el lector en forma de impresiones visuales -huellas mnémicas, explicadas desde el psicoanálisis- las cuales forma la ideología profunda.

Por otra parte, resalta a su vez el trabajo realizado por Quino y Rius, el primero creador de Mafalda que invita a cuestionarse tantas cosas como sean posibles, desde la perspectiva de una niña que quiere conocer el mundo, saber cómo funciona y preguntarse por qué funciona de esa manera.

El arte siempre ha mostrado las ideas que imperan en su construcción, ya sea a favor o retando este conjunto denominado ideología. Por tanto apunta no sólo a fines estéticos, aunque tenga como prioridad resaltarlos, también en su forma sutil da cuenta de muchos aspectos de la vida y sociedad, por lo que pueden ser una forma fidedigna de contar nuestra propia historia.