El camino hacia el arte
En días pasados se llevó a cabo en las instalaciones del Centro de Artes Visuales de la U.A. de C. un foro en el cual se trataron diversos temas, este fue titulado "Artistas Aprendiendo" dentro de esta dinámica se presentó el tema de Curaduría, quien tuvo como invitada a Adriana Gallegos quien es curadora del Museo Arocena de la ciudad de Torreón.
Con este contexto se habló de la curaduría principalmente qué es y qué se entiende por ello, ya que a pesar de ser una palabra que cada vez se pone más en boga se suele sobre-emplear. En términos estrictos viene de la raíz que significa cuidar hacerse cargo de o estar al pendiente, cabe mencionar que dicho término viene también el campo legal.
Pero ya poniéndolo en el ambiente dentro de un museo el curador es en esencia el investigador que selecciona y excluye piezas de la colección propia o forman parte de exposiciones temporales, así como la disposición en la que deben situarse para que el espectador genere una experiencia tanto perceptiva como de aprendizaje.
De este modo surgen las preguntas sobre qué es lo que hace un curador como parte de su día a día en el trabajo en el museo. La invitada ilustró precisamente sobre las funciones que desempeña y que van mucho más allá de lo que a simple vista podría entenderse como acomodar los objetos del museo. En primer lugar especificó que la curaduría se divide en dos vertientes la contemporánea que tiene una manera de funcionar diferente a la histórica en la cual ahondó y compartió el proceso tanto creativo como de investigación que requiere, el cual es exhaustivo ya que representa rastrear -cual detective- la procedencia del objeto sea pintura, escultura o material histórico. Durante este investigar surgen tanto características como contextos que de alguna manera cuentan las historias que se tejieron alrededor de la pieza.
Si bien la cantidad de objetos que se producen día con día es inconmensurable en número de aquéllos que son seleccionados por personas y que por algún motivo llegan a estar frente a un curador para ser expuestos es mínimo de ahí que representen una época o ciertas formas de ser y pensar.
Retomando el trabajo de investigación cabe destacar la amplia duración que conlleva realizarlo y la más compleja tarea de sintetizarlo para que en concreto sea llevado al público y trasmitir es conocimiento generado durante el proceso.
Ya que parte de ese trabajo en producir reflexión y nuevas ideas fomentadas por lo percibido.
Tradicionalmente se entiende al curador como el experto en un tema que se encuentra encerrado en el trabajo meramente académico, sin embargo en la práctica no es así, pese a la enorme carga teórica que representa la investigación se trata también de alguien que está en contacto de las necesidades que presenta el público que tanto asiduo como circunstancial de las exhibiciones de cura, además de trabajar con diverso equipo de trabajo, que también responde a las características del material que se va montar.
Finalmente cerró con una expresión muy acertada sobre el tema: "La curaduría no es al azar, no es improvisación ni una selección de objetos aleatorios" por lo que es posible comprender que no responde a caprichos ni modas, se trata de una mirada externa de alguien que realiza un trabajo arduo para aterrizar un objetivo en una exposición y que de ahí se genere conocimiento que pueda llegar a quienes la visiten.