El líder del PRI, Manlio Fabio Beltrones, le enseña el colmillo al joven maravilla, Ricardo Anaya, cabeza del PAN…
La semana pasada los candidatos del PRI, postulados para las alcaldías de Hidalgo, Villagrán y Mainero, Tamaulipas, manifestaron públicamente su apoyo al candidato blanquiazul a la gubernatura, Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Como reacción inmediata e inédita, el líder del PRI canceló el domingo pasado tales aspiraciones, expulsó a los "traidores", y aún más grave, los acusó de tener vínculos con el crimen organizado.
¿Beltrones pretende exorcizar al fantasma "Abarca" -exalcalde de Iguala encarcelado por complicidad en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa?
Si Manlio sólo hubiera expulsado a "sus" candidatos por traicionar al PRI para "apoyar" al aspirante del PAN, se entendería como una decisión plenamente justificable. Pero que además los acuse -sin pruebas- de estar coludidos con el crimen organizado, es repudiable e injustificable, después de habernos presumido que el partido tricolor realizó una selección dizque muy escrupulosa de candidatos en toda la República.
"El cinismo del PRI no conoce límites", replica el panista Ricardo Anaya, quien recuerda el pasado delincuencial de los exgobernadores Tomás Yarrington y Eugenio Hernández, ambos, criminales perseguidos por la justicia.
No cabe duda. La jugada del Padrino don Beltrone lleva jiribilla; acusa a los descabezados de someterse a las organizaciones criminales para inclinar la balanza a favor del candidato García Cabeza de Vaca; siembra la idea de que los golfos han decidido imponer en Tamaulipas a un panista con antecedentes penales.
Con maña, Beltrones coloca a Ricardo Anaya contra la pared, como si el candidato priista Baltazar Hinojosa, exalumno político del prófugo Tomás Yarrington, no tuviera moscas en la cabeza y cola larga que le pisen.
Poco importa si los tres priistas apestados sean tan culpables, como afirma Beltrones. Sólo cuenta que tal desprestigio mayúsculo embarre lo más posible al PAN, posicionado por arriba del PRI según algunas encuestas.
Total, la contienda electoral tamaulipeca es un batidero de porquería en tierra dominada por golfos y zetas; tragedia de violencia cotizada a la alza con votantes resignados a elegir sólo entre los malos y los peores.
EL MONJE ILUSTRADO
El "Canciller de Hierro", Otto von Bismarck, fundador del Estado alemán moderno, solía repetir: "La política es como las salchichas; duermes mucho mejor cuanto menos sepas cómo se hacen".
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