A la mitad de la temporada de la NFL y después de lo que pasó el lunes anterior en el "Campo del Soldado", sólo me ha quedado en claro de que los Cafés de Cleveland, tendrán la primera selección colegial en el próximo draft y por más que uno quiera hacerle al faquir atinándole lo que pueda ocurrir cada semana, hasta pienso que los brujos de Catemaco, quedarían en ridículo si les dijeran que se pongan a vaticinar los resultados del deporte de las tackleadas.
Ya por empezar, se tienen dos partidos que han terminado en empate que es de manera inusual porque después de que los Cardenales y los Halcones Marinos quedaron como si fuera tanda de penales con un 6-6, ahora fueron los Pieles Rojas y los Bengalíes quienes en el otro lado del charco, regresan a nuestro continente nomás jugando a las tablas.
Y ahora que toman el descanso los Pieles Rojas, los Patriotas, los Texanos, los Bengalíes, los Osos y los Cardenales, ésta se presentaba como una semana de las que les dicen "lights" para los mariscales de campo, ya que Sam Bradford era una alternativa en contra de los Leones, pero después de checar el papelón que hizo la línea ofensiva el pasado día de Halloween y que lo mandó a naufragar en varias ocasiones, ya todo se podría esperar y como tal situación, pues tal vez Ryan Tannehill se presente como la mejor preferencia aprovechando la visita de los Jets que andan de capa caída.
Pero si se habla de pasadores, no se tiene que pasar desapercibido precisamente a Derek Carr que en su tercera temporada en la liga, tiene a los Raiders con marca ganadora y que lo colocan como un candidato para MVP y a pesar de que la escuadra de Jack del Río está como la defensa 31 en total y lideran la liga en castigos, se encuentran con 6-2, mientras que el egresado de la estatal de Fresno tiene números sensacionales como un 100.9 de índice de mariscal de campo y que la conexión con Amari Cooper, ya es muy especial teniendo a Michael Crabtree, como una renovación.
Y si de algo se tiene que hablar en la Conferencia Nacional, es de los Vaqueros porque es indudable que Dak Prescott, le proporciona a Dallas la mejor oportunidad en una trayectoria del Super Tazón porque de acuerdo a lo que llevamos de dos meses de actividad, Dallas es contendiente para viajar a Houston el primer domingo del próximo mes de febrero y si no son los favoritos para estar en el juego grande, tienen a un mariscal de campo de encaje que hace que todos hagan las cosas mejor a su alrededor porque ese quarterback de conexión, es un novato seleccionado en el puesto 135 en total en el pasado mes de abril y que estaba tomando terceras cuerdas en agosto y con otro aspirante al jugador más valioso como Ezekiel Elliott y una defensa de Rod Marinelli que hace las jugadas cuando merecen la pena, al chiflado de su dueño ya lo tienen con la ilusión de soñar como cuando tenía a Aikman y a Emmitt Smith.
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