El italiano Alex Zanardi subió a lo más alto del podio tras su victoria en la contrarreloj de 20 kilómetros. (AP)
Alessandro Zanardi, expiloto profesional italiano de Fórmula Uno, se vio abocado tras un grave accidente en el que perdió las dos piernas a cambiar las cuatro ruedas de su monoplaza por las tres de su bicicleta adaptada, vehículo en el que ha encontrado una motivación para salir adelante y seguir compitiendo al máximo nivel.
Apasionado del motor, Zanardi estuvo ligado al mundo de los coches desde muy joven. Campeón italiano y europeo de karts en su época inicial, fue ascendiendo escalafones por la Fórmula 3 y la 3000 hasta llegar a la Fórmula Uno, categoría en la que disputó 44 pruebas en equipos como Jordan, Minardi, Lotus y Williams.
El 15 de septiembre de 2001, cuando competía en la CART, su vida cambió para siempre. Un grave accidente en la carrera de Lausitz (Alemania) casi acabó con su vida, pero, pese a perder el setenta y cinco por ciento de la sangre de su cuerpo, logró sobrevivir, aunque sin las dos piernas.
"Antes del accidente me preguntaba qué haría si me pasaba algo así. La respuesta era que me suicidaría, pero cuando me ocurrió eso no se me pasó por la cabeza. Estaba feliz de estar vivo y sabía que lo peor había pasado", confiesa.
Tras salir del hospital, necesitó rehabilitación y ayuda las veinticuatro horas del día hasta que encontró una nueva motivación. La encontró en el ciclismo de mano, deporte que practica y con el que ganó el Maratón de Nueva York en 2011 y logró tres medallas en los Paralímpicos de Londres.
En su primera prueba en Río, en la contrarreloj masculina categoría H5, Zanardi 'voló' por las calles de Pontal para ganar el oro con autoridad y sumar una nueva medalla a su palmarés ciclista.
Con un tiempo de 28:36.81, el italiano sacó más de tres segundos al australiano Stuart Tripp, que fue plata, y al estadounidense Óscar Sánchez, que se colgó el bronce.