— M. Forbes
Uno de los 7 ejes que la Reforma Educativa contempla desde su planteamiento inicial, es el de contar con un nuevo modelo educativo y una nueva propuesta curricular, que habrán de discutirse ampliamente en éste 2016 y que buscarán implementarse en el siguiente ciclo escolar. El problema es que para la mayoría de los ciudadanos e incluso para muchos actores educativos, no queda claro qué es un nuevo modelo educativo y para qué le va a servir a México.
Para lograr concretar dicho modelo educativo la SEP realizó, desde 2015, foros de consulta para la configuración del citado modelo, tanto para educación básica como para media-superior, por lo que recientemente el maestro Aurelio Nuño Mayer, socializó los resultados y las conclusiones, conformando así la propuesta de éste nuevo modelo.
Al investigar más, nos encontramos con una gran diversidad de conceptos acerca de lo que son los modelos educativos y en lo general encontramos que incluyen una serie de elementos y/o dimensiones, que van de acuerdo con la institución o con el experto que los plantea.
Si nos remitimos a sus acepciones más comunes o lo que algunos autores consideran como modelo educativo, encontramos por ejemplo a Yurén (1998), que lo entiende como una representación de un proyecto futuro o la perfección o ideal a seguir, o bien como muestras de una producción deseada.
En otras palabras, un modelo educativo es un patrón conceptual a través del cual se esquematizan las partes y los elementos de un programa de estudios. Estos modelos varían de acuerdo al período histórico, ya que su vigencia y utilidad depende del contexto social; cabe recordar que en México hace décadas que no se discutía acerca del modelo educativo nacional.
Al conocer un modelo educativo, el docente puede aprender cómo elaborar y operar un plan de estudios, teniendo en cuenta los elementos que serán determinantes en la planeación didáctica, que deriva ahora en secuencias didácticas. Por eso, se considera que el mayor conocimiento del modelo educativo por parte del maestro generará mejores resultados en el aula.
Los modelos educativos son también, como señala Antonio Gago Huguet, una representación arquetípica o ejemplar del proceso de enseñanza-aprendizaje, en la que se exhibe la distribución de funciones y la secuencia de operaciones en la forma ideal que resulta de las experiencias recogidas al ejecutar una teoría del aprendizaje.
Ahora bien, ¿en qué consiste la propuesta que la SEP plantea para este nuevo modelo educativo en discusión? Para empezar, reorganiza los principales componentes del sistema educativo nacional, para que los estudiantes logren los aprendizajes que el siglo 21 exige y que puedan formarse integralmente, tal como lo contempla el artículo 3º constitucional.
En ese sentido, el planteamiento pedagógico, es decir, la organización y los procesos que tienen lugar en la escuela, las prácticas pedagógicas en el aula y el currículo, constituye el corazón del modelo.
Partiendo de un enfoque humanista y tomando en cuenta los avances de las ciencias de la educación, la propuesta describe las principales características del nuevo currículo, que habrá de servir para orientar y encauzar los esfuerzos de los maestros, padres de familia, estudiantes, autoridades educativas y de la sociedad en su conjunto a fin de asegurar el logro de los fines de la educación.
Pero, ¿cuáles son los fines de la educación para el siglo 21? Primeramente formar un ciudadano libre y responsable, una persona crítica, analítica y creativa, que se exprese correctamente en español y en al menos un segundo idioma, que use eficientemente las tecnologías de la información y la comunicación, que trabaje en equipo, que tenga una alta autoestima y confianza en sí mismo además de cuidar su salud; un ciudadano que ame a México, que conoce su historia y valora su diversidad étnica y cultural, que cuide el medio ambiente y que aprecie y experimente el arte y la cultura. Podemos apreciar los importantísimos preceptos que la propuesta contiene.
Para materializar este nuevo planteamiento pedagógico, se parte de una nueva visión que pone "La Escuela al Centro" del sistema educativo, con una nueva organización escolar, con mejores prácticas en el aula y con un currículo actualizado y pertinente. En una posterior entrega revisaremos a profundidad esta nueva propuesta curricular.
De la misma manera, el modelo 2016 exige maestros motivados y mejor preparados, es decir actualizados y capacitados para implementar este planteamiento en las aulas, para ello se fortalecerá la formación inicial (las normales y las universidades) y los procesos de formación continua.
El objetivo es que los docentes construyan interacciones educativas significativas con creatividad e innovación, con el fin de estimular a sus alumnos a alcanzar los resultados esperados.
Como podemos observar, hablar de un nuevo modelo educativo nacional, requerirá que lo estudiemos a detalle y participemos activamente en los foros de discusión que nos permitan fortalecerlo, adecuarlo o cambiar lo que no le aporte a la formación de nuestros niños y jóvenes mexicanos.
Agradezco sus comentarios a: rolexmix@hotmail.com