Abraza. Francisco (cen.) recibió en audiencia, en el Aula Pablo VI del Vaticano, a personas que viven o han vivido en la calle. (EFE)
El papa Francisco pidió perdón ayer viernes a los pobres y desamparados del mundo por todos los años en que los cristianos les han dado la espalda. En una emotiva ceremonia en un auditorio del Vaticano, el pontífice agachó la cabeza y permitió que numerosos desamparados colocaran sus manos sobre sus hombros.
Unas 4 mil personas de 22 países que alguna vez estuvieron o están ahora sin hogar participaron en el evento, uno de los últimos que el pontífice ha organizado con motivo del Año Santo de la Misericordia.
"Les pido perdón", dijo el papa, en nombre de los cristianos que "ante una persona pobre, o ante el fenómeno de la pobreza, se dieron la vuelta". Francisco reiteró así el llamamiento que realizó al inicio de su pontificado para que "los católicos formen una Iglesia pobre y para los pobres" y agregó que todas la religiones tienen que colocar "a los pobres en el mensaje de Dios".
Luego que algunos que los pobres relataron las penurias que han enfrentado, el pontífice los alabó por mantener una vida digna a pesar de todo. Subrayó que la solidaridad "es uno de los frutos que nos da la pobreza" pues "la pobreza te hace sentirte solidario y te hace extender la mano a quien está peor".
VISITA A EXSACERDOTES CASADOS
El papa Francisco visitó en Roma a siete jóvenes, entre ellos uno de Madrid y otro de América Latina, que han abandonado en los últimos años el sacerdocio, informó la Santa Sede. El papa Francisco trasladó su cercanía y su afecto a estas personas que han visto cómo "después de varios años dedicados al ministerio sacerdotal", "la soledad, la incomprensión y el cansancio ha puesto en crisis su elección inicial".
MIL
Personas marginadas participaron en la ceremonia.
