El francés Michel Platini dijo que 'tengan claro que tengo la conciencia limpia, no cometí el más mínimo error'. (EFE)
Michel Platini reiteró ayer que su conciencia está tranquila y que seguirá luchando para revocar una sanción de la FIFA, en su discurso de despedida ante los líderes del fútbol europeo previo a la votación para elegir a su sucesor al frente de la UEFA.
El juez de ética de la FIFA permitió la intervención de Platini ante el congreso de la UEFA como un "gesto de humanidad", aunque cumple una suspensión de cuatro años para cualquier cargo relacionado con el fútbol por recibir un pago inapropiado.
En un alto en su exilio forzoso, Platini empleó la plataforma de Atenas para destacar sus logros desde que asumió la presidencia del ente rector del futbol europeo en 2007 y aconsejar a su sucesor.
Los delegados de la UEFA aplaudieron, aunque no ofrecieron una ovación de pie, al final del discurso del ex astro francés, que terminó diciendo: "Amigos del fútbol, adiós".
Antes de eso, y sin ofrecer detalles de las acusaciones, Platini insistió en que no hubo nada inapropiado en aceptar un pago de dos millones de francos suizos (dos millones de dólares) de la FIFA en 2011.
"Tengan claro que tengo la conciencia limpia, que estoy convencido de que no cometí el más mínimo error y que seguiré la batalla legal", dijo ante una audiencia compuesta, entre otros, por el nuevo presidente de la FIFA, Gianni Infantino. "Quiero dar las gracias a todos los presentes en esta sala que tuvieron la valentía y lealtad de apoyarme durante los últimos meses".
Se esperaba que a estas alturas Platini, de 61 años, hubiese abandonado la presidencia de la UEFA para comandar la FIFA. Pero la sanción del Comité de Ética hizo que Infantino, ex administrador de la UEFA, asumiera el destino que le estaba reservado a Platini, según él, al frente del ente rector del fútbol mundial.