Joseph E. Stiglitz, Premio Nobel de Economía en una de sus obras comenta lo siguiente:
"Los gobiernos deben y pueden adoptar políticas que orienten el crecimiento de los países de modo equitativo, somos una comunidad global y para convivir debemos cumplir unas reglas equitativas y justas, que reflejen un sentimiento básico de decencia y justicia social".
Repentinamente y por diversos medios de comunicación y analistas especializados en nuestro país, recibimos noticias y comentarios positivos de que la situación económica tiende a mejorar basados en aumento en el precio del petróleo, apreciación del peso vs. el dólar y el repunte en los Mercados bursátiles, pero para mí lo último, ultimo, último, fue ver las entrevistas con motivo de la Convención de Banqueros en donde prevaleció el optimismo y sobre todo, destacar la buena noticia en el marco de la Reforma Financiera, que destacó el secretario de Hacienda Vidagaray, de que por medio de la Banca de Desarrollo en este caso Nacional Financiera, Bancomex y Banobras se destinarían recursos para que la Banca Comercial atendiera (independientemente del banco de datos que se mencionó y reglas parametrisadas) principalmente a Pymes, pequeños empresarios que normalmente no tienen acceso al crédito lo cual me parece estupendo, pero mi crítica es por la forma para variar, extremosa por decirlo de cierta manera, por algunos banqueros al hablar de facilitar el crédito cuando no tienen el mérito y además de que tienen el 80 % de garantía de la Banca de Desarrollo por otorgarlos, es decir prácticamente sin riesgo y además hasta el momento no se aprecia baja en los intereses que cobran a sus acreditados a raíz de la reforma mencionada y el Spread que tienen entre la colocación y captación les permite obtener excelentes resultados; desde luego son las reglas del juego y el negocio es el negocio, por ello mi cita al inicio de este artículo.
Pero el fundamento de la presente entrega es considerar en mi opinión, que no hay razón para estar optimistas por algunos rasgos positivos que vimos la semana anterior, negativos no, por supuesto, pero sí recomiendo prudencia, vamos a ver: En Estados Unidos el PIB crece a febrero en un 1.9 % en forma trimestral, el empleo se ha sostenido favorablemente, pero ya no al ritmo de meses anteriores, en cambio la confianza del consumidor parece estancada y el déficit comercial creciendo con un déficit fiscal que supera al PIB; los expertos señalan que es manejable, yo opino que más bien no hay país que pueda cobrarle y parece exagerado, pero cuando se analizan panoramas a largo plazo, la situación política de Trump es un riesgo a considerar; la FED. tiene dicho panorama más amplio para su toma de decisiones que como siempre nos afectan directamente en nuestro país. Además EU no está suficientemente preparado para ser la locomotora que arrastre a la economía mundial.
China un día sí y otro no, intenta dar indicios al mundo de que su economía está funcionando, pero en realidad no sabemos ciertamente su fortaleza; ha tenido una sangría de capitales, lo que ya es conocido por todos, con un estancamiento económico y comercial significativo y un sistema financiero nada confiable; pero por supuesto el gobierno subsana ante los países que está atento para apoyar los momentos adversos que se tienen, sólo que tiene una deuda casi 4 veces superior a su PIB, el resultado de las acciones que se tomen ya lo sabremos tarde o temprano.
La Eurozona sigue muy débil y con diferencias marcadas en varios de los países agremiados, siempre insisto con Grecia que es un problema pospuesto no solucionado; por otra parte para impulsar su economía, el BCE con Mario Draghi al frete al igual que el de Japón, le sigue apostando a continuar con un enérgico paquete de medidas para inyectar más fondos al sistema financiero con tasa 0, se supone que los bancos con líneas de crédito regalado van a estimular el crédito barato, pero hasta en esta teoría no hay certeza firme: primero realmente la banca correría el riesgo de prestar. Y segundo, los acreditados lo toman para realizar inversiones sobre todo las empresas? También en esto veremos al tiempo los resultados; en mi concepto son hechos preocupantes en su conjunto. Aclarando, en México es muy poco probable una recesión ni de tasas de interés debajo de cero pero hay cosas que atender, urgir los resultados de algunas de las reformas, esperemos que siga creciendo el consumo interno y estar pendientes de los efectos de los recortes en el gobierno federal y en Pemex.
Pero es un hecho que hay que detener el seguir endeudándonos, con todo y que los conocedores digan que es manejable, se debe alentar la inversión pública y enfriar el gasto corriente no confiar en el discurso de que hay un buen manejo de la economía y las finanzas públicas y antes de que se me diga que veo un panorama sólo negativo, termino con una reciente declaración del gobernador de Banxico Agustín Carstens; entre otras cosas mencionó que ENFO "es conveniente tomar medidas oportunas a tiempo ante una crisis externa potencial que acecha en el exterior".