Con brindis y banquetes
celebran Día del Abogado;
sin “transas” ni “trinquetes”,
es fama que se ha ganado.
Pero yo digo, eso es cosa del pasado;
hoy el profesional del Derecho
es un profesionista respetado,
y esto se prueba bien en los hechos.
Incursiona en política y docencia,
en el servicio público y en el foro;
ejerce el derecho con decencia
y atiende los “casos” con decoro.
A mis colegas saludo con solidaridad
deseándoles éxito en su profesión:
Sirvan con pasión a la sociedad
y hagan del oficio una vocación.
Cuando la gente busca sus servicios,
lo hace confiando en su honestidad,
con la certeza de que no habrá vicios
que “tuerzan” el Derecho y la Legalidad
me uno animoso a la celebración,
del Derecho Romano una evocación;
“Juris praecepta haec sunt:
Honestae vivere, alterumnon laedere,
Et jus suum quiqae tribuere”.
(Los preceptos del derecho son:
Vivir con honestidad, no ofender a otro,
y dar a cada quien su derecho).
