La semana pasada en este espacio se planteaba la posibilidad de que el profesor Humberto Moreira Valdés, creador del grupo político que lleva 11 años y un mes en el poder en Coahuila, pudiera ser el causante de su final, ya que expresó su interés por competir por un distrito local para una diputación, lo que a la postre pudiese exacerbar el natural antimoreirismo (son casi dos sexenios, el puro paso del tiempo genera desgaste).
Hoy con el audio filtrado a los medios el día de ayer parece confirmar que ciertamente Humberto buscará a través de su partido político, denominado Partido Joven la diputación anunciada, con el que parece inminente que Miguel Riquelme Solís, virtual candidato del PRI al gobierno de Coahuila, habrá de hacer su campaña teniendo que maniobrar con este factor inesperado, aunque hay todavía que esperar, falta ver si en la ciudad de México, el inquilino de Los Pinos, decide si mete o no en cintura al polémico profesor.
El audio filtrado, entre otras cosas revela la supuesta distancia que existe entre los hermanos Rubén y Humberto, ya el que exgobernador critica en tres partes importantes la gestión de su hermano y hasta su propia personalidad: primero amenaza diciendo que si el PRI lo bloquea para ser candidato o si acaso lo expulsan del Partido Revolucionario Institucional, los expulsados del poder van a ser los priistas, sugiriendo que él tiene el poder para hacer perder al PRI; en otra parte del mismo audio, hace énfasis en que él no es Rubén ni que Rubén es Humberto, porque el profesor dice que él no es traidor y tercero critica acremente el trato que según él, Rubén le da a los ciudadanos, a quienes regaña constantemente y de los cuales se mantiene distante, dice que en vez de estar atendiendo a los más necesitados, el gobernador actual gusta de pasar más tiempo con la clase acomodada y hasta lo llama abejorro, para darle énfasis a la descripción que hace de su hermano a quien señala que desayuna caviar y champaña todos los días como dice el cuento de la abeja reina, pero le llama abejorro, lo cual hace con ánimo peyorativo.
Apelando entonces a aquel adagio que dice eso de que "el que calla otorga" puesto que hasta el momento con la información disponible ni Humberto ni nadie del gobierno del Estado ha desmentido, todo parece indicar que el Profe ha decidido robarle a su hermano el show de la fiesta. En la tradición priista el presidente de la república o en su caso el gobernador, con la venia del primero, designa a su sucesor, tal como Humberto lo hizo con Rubén, pero ahora el primero no quiere respetar la reglas de su partido.
Se dice que Miguel Riquelme podría haber esperado a que los hermanos Moreira su pudiesen entender, lo cual parece que no ocurrirá. Tendrán entonces que apelar a la instancia superior: el mismísimo presidente Enrique Peña Nieto, quien sin duda sí podría contener al exgobernador para no dificultar el camino del propio Riquelme hacia el Palacio Rosa, sede del Poder Ejecutivo de Coahuila, a menos que existiese una red de complicidades de tal calibre que impida que eso sucediera.
Confirmado entonces que Humberto Moreira será factor en la próxima elección de junio, quizá sea lo suficientemente importante para hacer perder al PRI y romper la hegemonía de ese partido. Tendrán que pasar semanas para dilucidar si toda esta disputa entre los hermanos es real, o simplemente es una cortina de humo con otros propósitos. Se sabe que en política todo se vale.