Trabajo. La señora Silvia Romero ha luchado durante años por un mejor futuro para los niños. (CLAUDIA LANDEROS)
Una de las mayores dificultades que enfrentan los niños con alguna condición del espectro autista, es la de la escolarización, que es en el área que se han tenido que dedicar más esfuerzos en la región por parte de las familias que cuentan con un paciente y de las mismas instituciones de apoyo.
Silvia Romero, madre de familia que ha trabajado por años en organizaciones e independientemente por mejorar la condición de su hijo con síndrome de asperger, señaló que se han enfrentado a una necesidad de mayor apertura para que estos niños puedan entrar en un ámbito regular, ya que muchos de estos pequeños, pueden alcanzar una alta funcionalidad académica.
También pueden integrarse a la vida escolar, "quizá no de manera normal, pero sí mediante un proceso de adaptación adecuada", indicó.
Logrando esta adaptación, al niño se le permite lograr su objetivos académicos, siempre dentro de sus capacidades y de acuerdo a su condición, pero es algo que le beneficia y lo impulsa en su superación.
El trabajo integral y multidisciplinario resulta fundamental para que un niño con esta condición logre la integración escolar, ya que va de la mano con la labor de los terapeutas, padres, maestros y otros.
Silvia ha logrado superar este proceso, aunque siguen trabajando; su hijo ya tiene 15 años de edad y cursa la secundaria, cuando era pequeño, era difícil conseguir especialistas o asociaciones de apoyo.
Considera que es importante estudiar sobre el tema.