Proceso. Será hasta el siguiente sábado cuando se defina su situación jurídica del presidente municipal de Álvaro Obregón, Michoacán.
Habitantes del municipio de Álvaro Obregón, Michoacán, exigieron justicia por los 10 pobladores asesinados y calcinados el pasado viernes.
Vestidos de blanco y con veladoras, marcharon la noche del martes por las calles del pueblo en repudio al múltiple crimen, por el que ya fueron detenidos el alcalde Juan Carlos Arreygue, un mando policiaco y tres agentes.
"Hay menores de edad entre los calcinados", decían las mantas que portaban.
Las 10 víctimas fueron identificadas por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) una vez concluidos los estudios en materia de genética forense que se practicó a los restos calcinados.
Se trata de Gustavo L., de 16 años, Sergio B., Kevin Jaime H., Juan de Dios Ch., César Omar M., y Erick G., de 18, 19, 20, 22 y 22 años, respectivamente.
Además de Ricardo G., Braulio Santiago P., Miguel R., y Luis Alberto L., de 42, 30, 29 y 36 años, respectivamente, según una tarjeta informativa difundida ayer por la PGJE.
De acuerdo con las investigaciones, las víctimas fueron sometidas y detenidas por policías municipales el pasado viernes, y subidas a una camioneta particular.
Sus cuerpos fueron encontrados al día siguiente en un paraje del municipio de Cuitzeo, en Michoacán, completamente calcinados.
La PGJE acusó ayer al alcalde de Álvaro Obregón de haber ordenado el asesinato de los 10 civiles por razones aún no determinadas, por lo que el servidor fue detenido junto al subdirector de la Policía Municipal.