Al igual que otros países después del desastre de Fukushima en 2011, Suiza prometió abandonar la energía nuclear en los siguientes años. Sin embargo, un grupo que se opone al uso de este recurso dice que el calendario del gobierno suizo no es lo suficientemente rápido, y está presionando por un referendo esta semana que podría apresurar el plan de salida.
Los electores votarán el domingo por una iniciativa impulsada por ambientalistas y opositores a la energía nuclear que de ser aprobada cerrará en el año 2029 la última de las cinco plantas atómicas de Suiza.