Barry Steenkamp declaró ante el tribunal que el asesinato de su hija devastó a toda su familia y que sigue pensando en ella “todo el tiempo”. (AP)
El padre de Reeva Steenkamp testificó ayer ante un tribunal sudafricano que la muerte de la joven, baleada en 2013 por su novio Oscar Pistorius, "devastó" a su familia, y añadió que sigue pensando en ella "todo el tiempo".
Un emocionado Barry Steenkamp habló en la vista de sentencia del exatleta.
"Debe entender que debe pagar por ello aunque lo hayamos perdonado", declaró.
Steenkamp dijo que la muerte de su hija contribuyó a causarle problemas cardiacos y otras afecciones de salud, y señaló que a menudo piensa en que la joven debió experimentar mucho miedo y dolor antes de morir.
Un pastor y una mujer cuyo hijo nació sin piernas testificaron antes para la defensa.
El sacerdote Marius Nel dijo también que había visitado a Pistorius después de que fuera encarcelado por homicidio en un primer juicio y dijo que lo había visto como un hombre "destruido".
Otra testigo, la islandesa Ebba Gudny Gudmundsdottir, dijo que el corredor había sido amable con su hijo minusválido y le había regalado una medalla de oro que ganó en una carrera.
"Aún tenemos esa medalla", dijo Gudmundsdottir. "Fue un gesto muy hermoso".
Pistorius vive ahora bajo arresto domiciliario tras cumplir uno de los cinco años de cárcel a los que fue condenado por homicidio por balear Steenkamp en 2013. Pero esa condena de homicidio fue revocada el año pasado por una corte de apelaciones, que condenó a Pistorius del delito más grave de asesinato.
Sudáfrica contempla una sentencia mínima de 15 años de prisión por asesinato.
