Sin gesto. El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura informó que se suspenderán las negociaciones hasta que haya un gesto humanitario de parte del gobierno sirio. (EFE)
Las conversaciones de paz para Siria fueron suspendidas hasta el día 25 por la falta de avances y la imposibilidad de obtener del Gobierno de Damasco un gesto humanitario que ofrezca esperanzas de voluntad para llegar a un resultado concreto.
La decisión fue tomada por el mediador de la ONU para este proceso diplomático, Staffan de Mistura, quien durante cinco días hizo denodados esfuerzos por obtener alguna señal favorable para estas conversaciones.
"Entramos en una pausa temporal, pero no significa el fracaso de las negociaciones (...), preferimos tener otra Conferencia (diplomática) de Ginebra sin ningún resultado o ser serios en lo que estamos diciendo", dijo De Mistura a los periodistas congregados fuera del hotel donde durante más de tres horas había mantenido una última reunión con la delegación de la oposición siria.
La sorpresiva suspensión coincide con el segundo día de una gran ofensiva militar del Ejército sirio y grupos afines sobre Alepo, apoyados desde el aire con bombardeos rusos, que consiguió romper el asedio del Frente Al Nusra en torno a dos localidades chiíes.
El ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, declaró ayer que esa ofensiva gubernamental complicó las conversaciones de Ginebra.
Por su parte, el Departamento de Estado de EU señaló que el receso en las negociaciones se debió en parte a que los bombardeos rusos interrumpieron el suministro de ayuda a los sirios. El jefe de la delegación del Gobierno, Bashar Jaafari, confirmó que su equipo retornará a Ginebra en la fecha fijada por el mediador.
Sin embargo, Jaafari fue más lejos y comentó que la decisión tomada por De Mistura se debió a que la delegación opositora "iba a retirarse del proceso" tras recibir "instrucciones" de los países que los respaldan, entre los que mencionó a Arabia Saudí, Qatar y Turquía.
Al contrario, la delegación de la oposición siria en las negociaciones de paz advirtió de que no retornará a Ginebra para seguir participando en este proceso a menos que vea avances humanitarios concretos.
"La delegación abandonará hoy (jueves) Ginebra, y no volverá hasta que veamos progresos en el terreno", declaró el dirigente de la oposición Salim Muslet. Desde el pasado viernes, cuando el mediador dio por iniciado el proceso diplomático, las partes en ningún momento aceptaron acudir al mismo tiempo a la sede de la ONU para que De Mistura pudiera hacer lo que había planeado: ejercer de facilitador y mensajero entre las delegaciones.
Oponiéndose a la versión de De Mistura, hubo un único punto en el que las delegaciones estuvieron de acuerdo y fue en el hecho de que no se habían iniciado las conversaciones indirectas y que las dos reuniones que el mediador consiguió sostener con cada una no formaban parte del proceso negociador. "Le hemos dicho a De Mistura que no habrá conversaciones significativas sin alivio (humanitario) para nuestro pueblo", dijo el líder opositor Riyadh Hijab, al hacer un balance de la situación. Aseguró que la Comisión Suprema de las Negociaciones (CNS), la alianza de la oposición política y militar reconocida para estas negociaciones, "no está boicoteando el proceso" y que su único objetivo es que se cumplan las garantías internacionales de mejoras para los civiles en Siria.
"Estamos hablando de cuestiones humanitarias que no pueden ser negociadas en la mesa porque el régimen intenta chantajear a la ONU de esta manera y no aceptaremos este tipo de maniobras", declaró Hijab.
Nuevas restricciones
El gobierno alemán impondrá nuevas restricciones a los refugiados que lleguen a Alemania debido a la presión de los sectores políticos de derecha y de extrema derecha, que demandan números más bajos de inmigrantes que sean acogidos en el país. La decisión de aprobar el llamado Paquete de Asilo II la tomó ayer el gabinete alemán en Berlín, que se reúne cada miércoles. El paquete de leyes contempla principalmente el establecimiento de "centros de acogida" en donde se decidirá con rapidez si el individuo tiene o no perspectivas de obtener asilo en Alemania. El refugiado que no tenga esa perspectiva, de acuerdo a las autoridades migratorias en esos centros, será regresado de inmediato a su país. Las nuevas previsiones también constituyen una medida de campaña política porque se avecinan elecciones en tres estados alemanes. En el paquete se incluye también a Argelia, Marruecos y Túnez (países del Magreb) como naciones seguras, una categoría que también se les está dando a diversos países de los Balcanes.
Mueren trabajadores humanitarios
Tres trabajadores humanitarios murieron ayer en un ataque aéreo en las inmediaciones de la ciudad siria de Alepo, según informó Naciones Unidas.
La organización, sin precisar detalles, explicó que a priori las víctimas no trabajaban para la ONU, sino para organizaciones no gubernamentales.
"Lamentamos profundamente este incidente y recordamos a las partes sus obligaciones bajo la ley humanitaria internacional de proteger a los civiles y a los trabajadores humanitarios", dijo en una conferencia de prensa el portavoz Farhan Haq.
El portavoz no se refirió a la autoría del ataque, pero sí expresó la "extrema preocupación" que los servicios humanitarios de la ONU tienen por la "intensificación de los combates y los ataques aéreos" en el área de Alepo. Según Naciones Unidas, como consecuencia de ello miles de personas se han visto obligadas a huir de sus casas en localidades del noreste de Siria en los últimos días.
El Ejército sirio está avanzando esta semana en la provincia septentrional de Alepo, donde ha arrebatado al Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, el control de varios puntos en el marco de una ofensiva lanzada en medio de la conferencia de paz de Ginebra.
El martes, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de la muerte de al menos 18 personas, entre ellas tres menores, cinco mujeres.