El hombre se dio a la fuga. (INTERNET)
Un jugador de fútbol aficionado mató a un árbitro de un golpe en la cabeza, supuestamente molesto porque el réferi le había mostrado la tarjeta roja.
Esto sucedió en Tulancingo, en el estado de Hidalgo, durante un partido entre Lindavista y Canarios-Rojo Gómez.
Según informa el periódico 'Criterio Hidalgo’, Rubén Rivera Vázquez de Canarios-Rojo Gómez fue expulsado por protestar por una falta, esto lo molestó demasiado y entonces le dio un golpe con la cabeza a Víctor Trejo, de 59 años.
El árbitro murió de un "hematoma subaracnoideo generalizado", causado por un traumatismo craneoencefálico.
Rivera se dio a la fuga al saber de la muerte de Trejo y ahora la policía ha montado un operativo en busca del agresor.
