Un futbolista se hartó de los insultos que la tribuna del equipo contrario arremetía contra él, que al terminar el partido se acercó a las gradas, bajó la malla que divide el campo de juego y lanzó una patada hacia una de estas personas.
El argentino Sebastián Pol del equipo Audax Italiano, según informa la prensa chilena, había estado recibiendo insultos de parte de los seguidores del equipo contrario durante todo el partido. Su equipo finalmente perdió el partido 4 a 1 con el de la Universidad Católica de Chile. Fue entonces cuando Pol finalmente explotó de coraje.
El jugador fue detenido por la policía luego del incidente y podría enfrentar cargos por su conducta antideportiva.
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