Foto: Archivo Siglo Nuevo
Hoy en día algunos niños menores de tres años juegan con dispositivos móviles incluso antes de aprender a hablar y tener control de esfínteres. Estos niños forman parte de la denominada generación “Z”, quienes se relacionan mejor a través de los medios digitales, ¿cambiará esta generación el concepto de convivencia familiar?
Las brechas generacionales se marcan a través de los acontecimientos importantes, la generación Z nació a mediados de los años noventa, convirtiéndose en nativos digitales, niños y jóvenes multitarea que prefieren resolver todo a través de la comunicación digital.
A los llamados “Baby boomers” (1940-1969) les tocó el final de la Segunda Guerra Mundial y representaron un inusual repunte en las tasas de natalidad; a la generación “Jones” o (1954-1969) la caracteriza el ansia o anhelo de éxito, hambre de poder adquisitivo y el consumismo; la generación “X” (1970-1985) se caracteriza por desear el cambio, sus integrantes muestran escepticismo hacia la política y se resisten a la idea de que el matrimonio es parte de una vida exitosa; la generación “Y” o “millennial” (1985-2000) está compuesta por jóvenes nacidos en pleno cambio de milenio. Los de la generación “Z”, nacidos a partir de 1995, en pleno postmodernismo y globalización, se caracterizan porque nacieron prácticamente en línea, salen del vientre directo a las redes sociales, al mundo digital que van a dominar.
BIENVENIDOS A LA ERA DIGITAL
Quienes conforman la generación “Z”, necesitan el internet tanto como el aire para respirar, les cuesta mucho aprender a través del sistema educativo tradicional ya que estar escuchando a una persona por más de veinte minutos sin observar el dispositivo móvil les resulta aburrido y prefieren dispersarse, mentalmente se “van” a imaginar sus planes futuros inmediatos.
¿Prácticos? Sí. ¿Pacientes? Jamás. Están acostumbrados a la inmediatez, a tener cualquier información aquí, ahora y en todas partes. Desconectaron la televisión, los discos compactos son innecesarios para ellos, el correo electrónico es anticuado, la información va y viene en tiempo real, toman fotos directamente de su pantalla y las envían al instante. La generación “Z” le dice adiós a los textos impresos sustituyéndolos con los llamados e-books.
RELACIONES INTERPERSONALES
Los niños de esta generación prefieren jugar, comer e irse a dormir con la tableta en la mano en lugar de convivir cara a cara con su familia, evitan el contacto visual para no descuidar su juego o chat en línea. La vida social de esta generación está definida por las redes sociales más populares, se interesan por incrementar el número de amigos virtuales, se caracterizan por romper reglas y vivir sin límites.
Entre sus ventajas se puede citar que poseen un espíritu crítico, tienen información global a un solo clic, se atreven a retar y luchar en contra del sistema que consideran opresor, tienen una mayor conciencia social, imaginan y planean un nuevo sistema de gobierno.
Según el director del Centro de Memoria y Envejecimiento de la Universidad de California, Gary Small, el uso de la red modifica la actividad cerebral a un nivel acelerado y esto puede ser beneficioso, ya que se activan nuevas zonas en nuestro cerebro, se generan nuevas conexiones neuronales evitando el deterioro cerebral prematuro.
Uno de los neurotransmisores involucrados en nuestra actividad cerebral es la oxitocina, misma que está relacionada con los patrones sexuales, la empatía y el amor maternal o paternal, y que provoca estados de relajación, sensación de bienestar y felicidad. Los seres humanos producimos oxitocina cuando nos sentimos aceptados y amados, cuando nos acarician, a través de los besos y los abrazos principalmente. Sin embargo, recientemente, una investigación muestra que las relaciones que establecemos en los medios digitales podrían tener el mismo efecto.
Paul J. Zak, investigador y profesor de psicología en la Universidad de Claremont en California, hizo un estudio sobre la relación de los usuarios de las redes sociales y la producción de la oxitocina, observando un incremento del 13 por ciento en los niveles de la hormona y una disminución de los niveles de cortisol, responsable del estrés, después de que el voluntario estuviera tuiteando por algunos minutos.
Según Zak, el cerebro interpreta las actividades de Twitter como interacciones personales y reales. Las redes sociales aumentan la producción de oxitocina y así elevan los niveles de confianza, empatía y generosidad, cita el portal WOM.
DESVENTAJAS
Los nativos de la generación “Z” muestran poca tolerancia a la frustración porque están acostumbrados a la inmediatez, a sentirse satisfechos de conseguir lo que desean a un solo clic y piensan que fuera de la red la vida funciona así.
Pueden tener episodios depresivos debido al sedentarismo y a la falta de respuesta o likes esperados en las redes sociales, se sienten conectados al mundo pero desconectados emocionalmente de su familia, caminan, bajan escaleras y conducen sin dejar de chatear, aumentando el riesgo de tener accidentes.
No dormir lo suficiente les genera cansancio crónico, estados de ansiedad, intolerancia y mal humor, el cerebro necesita la oscuridad profunda para producir melatonina e inducir al sueño, sin embargo a la generación “Z” le cuesta mucho soltar el dispositivo móvil y debido a la luminosidad que emiten las pantallas su cerebro no recibe la señal de descanso.
¿QUÉ SE ESPERA DE ELLOS?
Esta generación aún no pasa de los 20 años de edad y no han ingresado a la vida laboral, pero anhelan su autonomía, ser sus propios jefes, o bien trabajar por objetivos desde su vida digital, sin la necesidad de estar ocho horas dentro de una oficina.
Son más emprendedores, representan la nueva fuerza de trabajo global, buscan hacer sus propios negocios, pero están en riesgo de vivir literalmente en la nube, porque a veces piensan que con sólo desear podrán conseguir lo que quieren ya que no conocen la cultura del esfuerzo.
La generación digital es muy creativa, su organización será horizontal, lograrán el éxito a través de sus redes de contacto, les gusta el trabajo colaborativo, mas no necesariamente en grupo, trabajar desde casa y enviar los datos a alguien de su equipo para que integre toda la información. Pueden ser muy productivos si se les permite estar en un ambiente adecuado en donde se sientan con libertad de innovar, crear y tomar decisiones, además de sentirse cómodos con su vestimenta informal.
INFORMARSE PARA ENTENDERLOS
Los niños y jóvenes de la generación “Z” se sienten abrumados y desesperados con el sistema de educación tradicional que aún existe en la mayoría de las escuelas, su estilo de aprendizaje es interactivo, colaborativo y participativo, los papás y maestros de esta generación necesitan informarse y mantenerse actualizados en la tecnología para no perder contacto con ellos.
Los papás de las niñas y niños pertenecientes a la generación “Z” tienen una gran responsabilidad, hacer todo lo posible por conectarse emocionalmente con sus hijos, procurar el contacto y enseñarles a disfrutar su presencia y cercanía para que comprendan que el uso de cualquier medio digital jamás sustituirá el calor de un abrazo, ni la ternura desbordante de una mirada.
Twitter: @Marimar_Centeno