Abuso. Policías del Estado de México golpearon y detuvieron a reportera del diario Reforma durante un desalojo en Atizapán. (TWITTER)
Una reportera de Reforma fue golpeada, humillada y detenida mientras cubría un desalojo en Atizapán, ante la mirada de un fiscal del Edomex, quien, lejos de intervenir, se burló de ella.
La informadora fotografiaba las detenciones de paracaidistas en el predio Loma Larga cuando fue golpeada por dos policías con toletes y le arrebataron la cámara.
La periodista pidió auxilio a Gerardo Ángeles Enríquez, fiscal regional de Tlalnepantla, quien se mofó, dijo no conocerla y le ordenó no mirarlo. De ahí la llevaron a un cuarto con otras dos detenidas. Una mujer agente le robó un IPad y una grabadora.
La reportera fue abofeteada tres veces por un hombre vestido de civil que daba órdenes y que además le escupió en el rostro. Luego, fue llevada a una barda donde la obligaron a ponerse los zapatos al revés y una agente le hizo tocamientos genitales durante 5 minutos en busca de celulares.
Posteriormente fue llevada en una unidad de la Policía estatal al MP de avenida Sor Juana, en Tlalnepantla, donde fue incomunicada durante dos horas junto a otras detenidas. La agresión fue atraída por la Fiscalía de Delitos Cometidos por Servidores Públicos donde, hasta el cierre de la edición, la reportera seguía declarando.
El gobernador Eruviel Ávila ofreció anoche, en nombre de su Administración, una disculpa a la reportera, en lo personal y en lo profesional.
