Hasta ahora la viruela era considerada una de las enfermedades más antiguas de la humanidad, pero los restos de virus descubiertos en una momia infantil del Siglo XVII en Lituania podrían probar que el agente patógeno no es tan antiguo como se pensaba. Un equipo de investigadores descubrió restos de virus en la momia de un niño enterrado en una iglesia en Lituania. Los análisis de ADN de las reliquias y su comparación con brotes más modernos de viruela apuntan que las cepas sólo pueden remontarse en el tiempo hasta un predecesor común que data de entre el año 1588 y el 1645, según un estudio publicado en la revista 'Current Biology'.
En ese momento, se produjo un periodo de migración y colonización que habría difundido la viruela.