Desaparecería. Se hará riguroso el control del uso de los vehículos policiales, para darles mejor aprovechamiento. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El Municipio gasta un promedio de 21 millones de pesos al año en la atención y reparación de alrededor de 350 unidades, entre ellas, de Protección Civil, GATES, Vialidad y Seguridad Pública Municipal, según el alcalde, Miguel Ángel Riquelme Solís.
Por ese motivo, anunció que se aplicará un severo control en el mantenimiento de vehículos de las áreas encargadas de la seguridad pública.
A la par, Riquelme Solís expresó que solicitará al Gobierno del Estado la desaparición del Fideicomiso para la Seguridad Pública en la que el Municipio es el que aporta el recurso, tanto para la compra de vehículos, el pago de los seguros contra accidentes y seguros de vida de los policías.
Dijo que prácticamente el recurso municipal es la única aportación que recibe este Fideicomiso el cual con el tiempo, ha dejado de cumplir parte de los objetivos por el que se creó.
Explicó que tras un diagnóstico, se decidió aplicar medidas específicas para un mejor uso de las patrullas en general que signifique mayor aprovechamiento de las Pick up, carros y motocicletas, así como los Raptor y Segwey.
"Lo que haremos es un mejor control del uso y hacer que se cumpla con el mantenimiento preventivo".
Los vehículos que ya excedan de cierto kilometraje, y que el mantenimiento resulte más costoso, serán desincorporados para comprar unidades nuevas.
Los que salgan de las áreas de seguridad pública, se proyecta ponerlos a disposición de Servicios Públicos, para que se canalicen a Parques y Jardines, Limpieza como medio de transportación para los brigadistas de la Marea Roja
A través de un convenio se dejarían bajo la responsabilidad de empleados municipales interesados en comprarlos.
Riquelme dijo que mientras que recibió un parque vehicular de 50 unidades, "hoy tenemos alrededor de 350 y en buenas condiciones generales, nada más que no queremos dejarlas caer... no queremos que se nos descompongan por cualquier cosa".
Explica Riquelme que desde 2014 se cambió la proveeduría de talleres que daban el servicio de reparaciones y ahora el seguimiento que se le dará a cada caso es desde los patios de seguridad pública, la salida a la calle, su uso operativo, horarios, resguardantes y bitácora.
Al control que había, ahora se seguirá otro más riguroso mediante un esquema más amplio.
MDP
Se invierten en atención de vehículos de seguridad pública