Érick (izquierda) y Juan José son aficionados al beisbol. (Jesús Galindo)
Nativos de Mazatlán, Sinaloa, los hermanos Juan José y Érick Arellano Hernández irrumpieron en la escena del beisbol mexicano hace tres años, cuando compraron la franquicia de los Leones de Yucatán; desde entonces, su apellido ha sonado fuerte en la pelota nacional, caracterizados por su afán de convertir al beisbol en una industria rentable en lo monetario, pero que además otorgue buenos resultados deportivos y excelentes experiencias a los aficionados, basados en el estilo de las Ligas Mayores de Beisbol, de los Estados Unidos.
EMPRESARIOS
Al igual que muchísimos jóvenes sinaloenses, los hermanos Arellano Hernández son grandes aficionados al rey de los deportes, el beisbol, por lo que aprovechan cada oportunidad para presenciar juegos en parques de México y Estados Unidos. Son propietarios de la firma UPC Corporate, empresa de consultoría que opera en Mazatlán y ofrece soluciones a negocios diversos en el área financiera, fiscal, legal, de tecnología y de auditoría. Poseen además diversas empresas en el ramo inmobiliario, gasolineras, hoteles, entre otros.
Su apoyo al beisbol no se limita al nivel profesional, pues en las ligas infantiles de Mazatlán, Sinaloa, patrocinan a cerca de 50 equipos, gracias al nombre de Hit, que es su cadena de gasolineras. Tienen también la Academia de Beisbol del Pacífico, que opera en el puerto de Mazatlán y donde se entrenan niños que son instruidos por coaches profesionales, esa academia la inauguró Fernando Valenzuela.
