Columnas Deportes Columnas Deportes Editorial

Historias de Banquillo

HUGO CARRILLO

Oswaldo Sánchezes el portero que llegó a Torreón con el compromiso de luchar por la salvación de Santos Laguna de la pérdida de categoría. Aunque durante los primeros meses, las lesiones no lo dejaron demostrar su gran habilidad en el arco, pronto se ganó el corazón de la gente partido tras partido.

“Soy el tapatío más lagunero”, dijo el arquero un 19 de diciembre del 2014 cuando le decía adiós no sólo a Santos Laguna, sino también al deporte que le dio todo: El futbol. El portero anunció oficialmente su retiro vistiendo un elegante traje negro con un corbatín delgado del mismo color; se despidió y dejó abierto el arco que defendió del 2007 al 2014.

Cuando Oswaldo tomó la decisión de venir a La Laguna en el 2007, fue todo un valiente. El Santos contaba con problemas de descenso y la oferta era arriesgada pero ambiciosa a la vez.

Su salida del Guadalajara le costó caro con los aficionados rojiblancos. En su primera visita al Estadio Jalisco y avistiendo la playera santista, algunos billetes caían sobre el túnel de jugadores por la jugosa oferta que se especulaba que había tomado Oswaldo para dejar al Rebaño y enrolarse con Santos Laguna.

Actualmente, Sánchez probablemente no se arrepiente. Se ganó a toda una región y fue ejemplo en el futbol mexicano convirtiéndose en un ícono en la portería; ser el jugador con el mayor número de partidos jugados en toda la historia del futbol mexicano no es cualquier cosa. Sánchez siempre será recordado como aquel capitán quedaba todo por los colores, a pesar de no ser lagunero, su ADN era santista y la gente lo agradecía. Siempre emitía gritos y manoteos cada vez que caía al suelo por una atajada majestuosa que ponía de pie a todo el Corona.

En la semana previa a los partidos, Oswaldo hablaba ante los micrófonos, se convertía en un auténtico líder de opinión deportivo. Tan políticos eran sus discursos cuando hablaba con la prensa, que hoy se dedica a ser analista en la televisión nacional.

La polémica siempre fue una fiel acompañante del exarquero, tanto en Selección Nacional, con los árbitros y con otros jugadores. Oswaldo Sánchez era todo un profesional y cumplía los sueños que su padre “Don Felipe” y él se trazaron alguna vez. Muchos quisieron ver caer a Oswaldo, unos lo hicieron y otros se quedaron con las ganas. Así es el futbol, Sánchez era el clásico futbolista que era abucheado en estadios ajenos. El espectáculo en el arco llevaba su nombre y todos los equipos del futbol mexicano sabían qué portero tenía enfrente.

El verdadero campeonato de Oswaldo Sánchez fue haber dejado un legado y un estilo. Una manera de porterear que era muy propia del exarquero. Sublimes atajadas y pasionales encuentros describen la trayectoria del tapatío quese convirtió por ambicioso en un lagunero por adopción. Santos le rinde un homenaje que perdurará por siempre y lo convertirá en “El Eterno Capitán”.

huggocarrillo94@gmail.com

Leer más de Columnas Deportes

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Deportes

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1215459

elsiglo.mx