Detención. François Molins dijo que el presunto yihadista francés Reda Kriket, fue inculpado por la Justicia francesa.
El presunto yihadista francés Reda Kriket, detenido el pasado jueves cuando, según las autoridades, ultimaba un atentado terrorista, fue inculpado ayer por la Justicia francesa y puesto bajo detención provisional, indicó el fiscal de París, François Molins.
Kriket, de 32 años, ha pasado seis días en los calabozos antes de ser presentado ante un juez, una duración excepcionalmente larga que la ley sólo justifica por la preparación de un atentado inminente o por necesidades de cooperación internacional, agregó Molins en una declaración ante la prensa.
Al término de ese período, ha sido imputado por asociación de malhechores con fines terroristas y por tenencia de armas y explosivos, entre otros cargos.
Aunque el sospechoso se ha negado a declarar y se ha limitado a negar que sea un terrorista, el fiscal confirmó que "todo apunta" a que la detención de Kriket el pasado jueves evitó la inminente comisión de un atentado "de extrema violencia", tal y como se revela del "arsenal de amplitud inédita", con numerosas armas, explosivos y detonadores, "algunos listos para ser utilizados".
Molins indicó que en el apartamento alquilado por Kriket en Argenteuil, a las afueras de París, bajo una falsa identidad, se encontró una gran cantidad de material para fabricar bombas, además de cinco fusiles de asalto Kalashnikov, una metralleta, siete pistolas y numerosa munición.
También hallaron siete teléfonos nuevos, que Molins dijo que podrían haber servido para coordinar el atentado, y pasaportes robados, para moverse con identidades falsas.
DÍAS
Ha pasado Kirket en los calabozos de París.