Masacre. En el sexenio pasado el gobierno ocultó que agentes de migración fueron detenidos en el caso de la masacre de San Fernando, en donde se encontraron los restos de decenas de migrantes.
El Gobierno federal ocultó que agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) fueron detenidos por sus relaciones con el crimen organizado, cuando los panistas Cecilia Romero y Salvador Beltrán del Río encabezaban ese organismo en el sexenio pasado.
Durante la investigación por las masacres en San Fernando, Tamaulipas, la PGR descubrió que había agentes involucrados en el secuestro y entrega de migrantes al crimen organizado.
El 4 de abril de 2011 personas que se identificaron como agentes del INM interceptaron un autobús en Altamira, Tamaulipas, y bajaron a los salvadoreños Gingli Esaú Ortiz Melgar y Douglas Coronado Flores Guevara.
Según informes el 11 de abril de 2011, efectivos del Ejército rescataron a los tres centroamericanos y detuvieron en flagrancia a los plagiarios Juan Carlos Segura Rivera y Marcos Alvarado Domínguez, en Tampico.
El 19 de abril de ese año la Policía Federal detuvo a Mónica Moctezuma, quien confesó que un tal Víctor Reséndiz "El Peludo" o "Papá Pitufo", la había enviado a sucursales de Elektra, Soriana y Walmart para retirar 13 depósitos con los que se pagaron rescates de migrantes.
Moctezuma reconoció al detenido Juan Carlos Segura y a un agente de Migración, lo que ocasionó que el mismo día fueran detenidos José Luis Jiménez Avendaño, Ramón Iván Gloria, Roberto Hernández González, José Manuel Sánchez, Moisés Pérez y Vicente Alberto Rosas, elementos del instituto que depende de la Secretaría de Gobernación.
Todos fueron detenidos y sometidos a proceso porque las víctimas lograron identificarlos, pero el Gobierno nunca lo mencionó en las comunicaciones oficiales sobre el caso.
También se desconoce si continuó con una línea de investigación que involucraba a más trabajadores de Migración.
Se tuvo acceso a un documento sobre el caso donde se menciona la participación de los agentes migratorios en estos sucesos.
Uno de los involucrados en las masacres de San Fernando confesó a la PGR que cada vez que secuestraban a un migrante, pedían mil 200 dólares de rescate a sus familiares y que, de no pagar, ordenaban ejecutarlos.
Hallan 15 sitios con restos humanos
La Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, que por dos semanas se dedicó a buscar fosas en Veracruz, informó ayer que encontró 15 sitios con restos humanos.
Integrada por familiares de personas desaparecidas de todo el país, la Brigada llegó a Amatlán de los Reyes el 10 de abril.
"Durante nuestra estancia en esta comunidad de Veracruz pudimos conocer y documentar cerca de 40 casos de familiares de personas desaparecidas que, por miedo u omisión de las autoridades, no habían recibido asesoría ni para interponer la denuncia", relató Alma Rojo,integrante del grupo Sabuesos de Sinaloa, en conferencia de prensa.
"Después de 15 días de labores, (la Brigada) localizó 15 puntos con restos humanos, muchos de ellos calcinados, que esperan ser identificados para ser devueltos a sus familias".
Su primer hallazgo fueron pequeños, huesos como rótulas y pedazos de costillas; luego encontraron un fémur y ropa quemada.
"Es horroroso lo que se hace en Veracruz. Es horroroso lo que hace la delincuencia y cómo asesina a tanta gente", señaló Rojo.
MIL
dólares de rescate le pedían a los familiares de las víctimas.