El Instituto Nacional de Migración (INM) refrendó su compromiso de salvaguardar la integridad, así como de rescatar, proteger y atender a quienes transitan por territorio mexicano, sin importar su situación migratoria o lugar de origen.
Por medio de una tarjeta informativa, se manifestó especialmente por el estricto apego al marco legal y el respeto irrestricto a los derechos de niños y adolescentes migrantes a su paso por la República.
La dependencia de la Secretaría de Gobernación (Segob) aseveró que ofrece un trato humanitario a los menores de edad que administrativamente permanecen de manera irregular en México y que huyen de condiciones de vulnerabilidad de su país de origen.
Desde 2013 ese instituto no recibe de organismos o dependencias, nacionales o extranjeras, a través de programas o iniciativas, recursos económicos para la operación migratoria en México. Los únicos recursos ejercidos por ese organismo son los autorizados por la Cámara de Diputados, según fue publicado en el Diario Oficial de la Federación como parte del Presupuesto de Egresos de la Federación 2016, agregó.
El Instituto Nacional de Migración explicó que infantes y adolescentes migrantes extranjeros rescatados sin acompañamiento de ningún tipo son canalizados a los Sistemas para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de los estados y municipios, como marca la ley.
Luego de ello, de inmediato se notifica a los países de origen sobre su rescate, para que se localice a sus familiares y privilegiar en todo momento la unidad familiar.
A todos se les ofrece refugio en México, pero el instituto tiene documentado que en la abrumadora mayoría de los casos ellos lo rechazan, porque su único propósito es llegar a Estados Unidos o reencontrarse con sus parientes más cercanos.
El instituto reiteró que es prioridad la reunificación familiar, con atención especial de los menores de edad que viajan no acompañados.
Refirió que a través de los Oficiales de Protección a la Infancia son trasladados a su lugar de origen y en todo momento se privilegia la salvaguarda y protección de sus derechos humanos, debido a que son rescatados en condiciones de riesgo y vulnerabilidad en su trayecto al país del norte. Sin excepción, a todos se les informa sobre sus derechos y se les brinda servicios de alojamiento, alimentación, comunicación telefónica con sus representaciones consulares y familiares, atención tanto médica como sicológica, áreas de recreación así como el retorno asistido.
