Disminuida. Hillary Clinton se vio disminuida después de que se diera a conocer más sobre su correo personal.
En una carrera contra el reloj para motivar a sus partidarios a votar en las asambleas partidistas de Iowa, los aspirantes presidenciales extremaron sus recursos en las últimas horas previas a la primera votación del calendario electoral.
El resultado fue una serie de mensajes por momentos contradictorios. Aun mientras los candidatos rogaban a sus partidarios a que fuesen a votar, algunos también trataron de reducir las expectativas y se enfocaron en la elección siguiente en New Hampshire el 9 de febrero y en los comicios siguientes.
El republicano Donald Trump, ligero favorito sobre Ted Cruz en Iowa, pronosticó que varios senadores lo avalarán en vez de su colega de Texas.
Por su parte, la demócrata Hillary Clinton, en una puja reñida con el senador de Vermont, Bernie Sanders, insinuó que las motivaciones políticas explicaban el revuelo causado por el anuncio del Departamento de Estado el viernes de que mantenía el secreto sobre algunos correos electrónicos que aquella usó mientras era secretaria de estado.
Un factor -el clima- estaba fuera del control de los candidatos. Un pronóstico de nieve para el lunes por la noche no parecía suficiente para disminuir la concurrencia de votantes aunque podía dificultar la salida de Iowa de algunos de los aspirantes. Pero por lo menos el republicano John Kasich ya había viajado a New Hampshire.
Iowa ofrece sólo un puñado de delegados que determinarán las candidaturas, pero el juego de las expectativas parecía contar más que la matemática electoral.
"La gente está realmente entusiasmada y, si viene a votar, creo que producirá una de las mayores sorpresas políticas en la historia moderna de nuestro país", dijo Sanders a CNN.
Por su parte, Clinton dijo a ABC que había estado sometida a "años de escrutinio, pero sigo en pie".
Trump dijo que "no tengo por qué ganar" en Iowa, aunque consideró tener "una buena posibilidad" de triunfo.
"Uno de los motivos por los que ganaré y, según creo, que no ganará ninguno de los otros, es porque voy a conseguir estados que ellos nunca podrán conseguir", dijo a CBS.
Ted Cruz afirmó que "lo que veremos es si se junta la vieja coalición de Reagan. Estamos viendo a conservadores, evangélicos, libertarios y demócratas de Reagan. Y si los conservadores se presentan, vamos a ganar mañana", dijo a Fox News.
Entre los republicanos, Cruz dirigió la mayor parte de sus dardos contra Marco Rubio de quien dijo en un aviso "Aumentos de impuestos. Amnistía. El Obama republicano", pese a que se considera que Cruz disputa con Trump el primer lugar en las elecciones de Iowa.
Por su parte, Rubio respondió que el ataque de Cruz era una señal de desesperación. "Según mi experiencia -dijo_, cuando la gente empieza a atacarte es porque estás haciendo algo bien".
Cuando se le preguntó si Rubio podía ganar o quedar segundo, su principal estratega Todd Harris respondió riendo que su objetivo en Iowa era llegar tercero, detrás del ostentoso Trump y el altamente organizado Cruz.
En la última encuesta de preferencias antes del comienzo electoral, Trump tenía el respaldo del 28 % de los republicanos inclinados a votar, delante de Cruz con 23 % y Rubio 15 %. La encuesta de Iowa, publicada por The Des Moines Reporter y Bloomberg, halló que entre los demócratas Clinton tenía un apoyo del 45 % y Sanders 42 %. La encuesta se realizó entre el martes y el viernes, con un margen de error del 4 %.
El secretario de estado de Iowa, Paul Pate, censuró la campaña de Cruz por haber enviado una circular a los votantes potenciales con la apariencia de una notificación oficial advirtiendo sobre "escasa concurrencia de votantes anticipada en su área". Pate dijo que la campaña de Cruz era engañosa.
Bernie Sanders, un aspirante por el que pocos apostaban al inicio de la carrera demócrata, depende del entusiasmo de un ejército de voluntarios para repetir la hazaña de Barack Obama en 2008 y arrebatar la victoria en Iowa a la favorita del partido, Hillary Clinton, y su potente organización.
Las oficinas de campaña de Sanders y Clinton en Des Moines, la capital del estado que hoy inaugurará el proceso de elecciones primarias en Estados Unidos, son un reflejo del estado en el que llegan los dos principales aspirantes demócratas a la recta final casi empatados en las encuestas.
Se sorprende de liderazgo
El aspirante republicano a la Presidencia de EU Donald Trump dijo ayer que cuando presentó su candidatura no esperaba liderar las encuestas de cara a los caucus (asambleas populares) de Iowa, que se celebrarán hoy lunes y suponen el comienzo del proceso de primarias en el país.
Durante una entrevista en el programa "This Week" de la cadena ABC, el magnate fue preguntado por si alguna vez había imaginado estar liderando los sondeos en las vísperas de las asambleas populares de ese estado, a lo que Trump respondió: "La verdad es que no". "Soy alguien que sabe cómo ganar. Cierro el trato. Pero nunca pensé que lideraría por 24 puntos en diferentes estados", añadió.
Trump aprovechó su intervención para arremeter contra su principal rival en las primarias, el senador por Texas Ted Cruz, a quien llamó "mentiroso total" por decir que el multimillonario apoya un sistema de salud similar al propuesto por Obama. "Mira, Ted Cruz es un mentiroso total. Estoy muy en contra del Obamacare", afirmó el magnate, quien según la última encuesta publicada está al frente de los republicanos.