Sin conocer el resultado del sábado sigo creyendo que existe un progreso (desesperadamente lento) en el nivel futbolístico de los recién llegados para este Apertura, sigo creyendo que Mauricio Cuero y Fredy Hinestrosa van a ser de gran ayuda si les siguen dando minutos. Sigo creyendo que a Emiliano Armenteros vale la pena rescatarlo del tremendo slump en que se encuentra, por los motivos que sean el zurdo argentino está desconocido y José Manuel de la Torre tiene un gran reto para volver a contagiarle la alegría por el juego al fino volante. Ahí hay tres elementos que creo firmemente aportarán para que el club lagunero regrese a la parte de arriba de la tabla el siguiente Clausura, el asunto, obvio es la premura que en este momento empieza a agobiar a la institución santista lo que determinará si la paciencia será la suficiente para esperar el momento en que detonen estos elementos. El calorcito del infierno ya empieza a incomodar los pies del Guerrero.
Por lo pronto parece buena idea traer mínimo de dos a tres jugadores del medio local para que vengan a ayudar en la reconstrucción del equipo, la debilidad del cuadro comarcano es clara, sólo contra Jaguares en la última jornada en casa saldrá como claro favorito, en los demás encuentros siempre se apostará en su contra. El resto de este torneo debe de jugarse en un estado mental muy difícil de conseguir, algo que combine el jugar relajado con un máximo de concentración, ya se, ni Sigmund Freud quizás pudiera conseguir esto en sus pacientes, pero la liguilla ya se fue, Veracruz, Jaguares y Monarcas están debajo de Santos Laguna en la porcentual y Gallos Blancos y Puebla empatados, es decir, son seis equipos los involucrados y los Guerreros tienen todos los elementos para separarse de este pelotón, la apuesta será: ¿te la juegas con lo que tienes o modificas en lo sustancial ?
¿Qué es los sustancial? Posiciones claves como un medio volante que organice la media cancha y que tenga pegada para redescubrir las ventajas de las jugadas a balón parado. Ya lo tenían y se llama Juan Pablo Rodríguez, lo dejaron ir en el afán de renovación, no parecía mala idea en su momento, pero como esta jugando Chato, ahora si resultó una pésima idea.
Lo que sigue resultando increíble es la orfandad y desamparo que sigue sufriendo el medio campo santista ante la ausencia de Diego González, la única manera de apreciar su trabajo es su ausencia, simplemente nadie ha podido acercarse al despliegue físico e inagotable fijación para estorbar al rival, de un lado a otro, de una área a otra, enredándose con el balón equivocándose y corrigiendo, provocando goles del rival para después anotárselos, ni De Buen, ni Armenteros han podido con el paquete, después de ver correr como poseído al llamado "Pulpito", tanto de Buen como Armenteros parece que juegan siempre con la cámara phantom tomándolos.
Ulises Rivas se asoma y más suelto parece que el chavo lagunero puede quedar como pareja ideal de Molina, a su lado Uli deberá de aprender mucho más que el gran bagaje que lo antecede en equipos juveniles, tanto como de Santos como de Selección Nacional, nada como estar en medio de la refriega de una Liga tan competitiva, llena de extranjeros que pelean por seguir gozando de las bondades de grandes sueldos y en su mayoría de estupendas instalaciones.
Santos tiene en el papel un buen equipo y no tiene que andar sufriendo penurias, pero así es esto, sólo Jonathan Rodríguez ha sido de impacto inmediato el resto de las incorporaciones siguen en proceso de adaptación definitiva. Por otro lado, elementos como el chileno Rabello ya se estancó
En ese proceso al igual que Ulises Dávila a estos dos convendría buscarles acomodo en otro equipo, son jóvenes tienen futbol, pero en Santos simplemente dan la impresión que ya no encajan. En fin la disyuntiva ahí esta, restan 21 jornadas para definir el descenso ¿Cómo los vas a enfrentar? ¿Confiando en lo que tienes, o trayendo a dos o tres y darles la titularidad? "La respuesta amigo mío está flotando en el viento" diría el Nobel rockero.
Rrosell@hotmail.com
