Me perdonan, se perfectamente que hoy domingo día de Navidad se define el campeón del futbol mexicano del torneo de Apertura 2016, pero al igual que miles de laguneros estamos más interesados en lo que suceda a 2,879 kilómetros de Monterrey sede de la final de soccer, nosotros, la Steeler Country Lagunera tendremos nuestros ojos y nuestra alma en lo que ocurra en el Heinz Field estadio de los gloriosos Acereros de Pittsburgh que buscaran asegurar su pase a playoffs y de paso ganar su División por vigésima segunda ocasión, quince veces la Centro y si ganan hoy sería la séptima vez que ganan la Norte.
El rival, los Cuervos de Baltimore, los odiosos pajarracos, las urracas parlanchinas. Ravens a diferencia de otros detestables rivales como los Bengalíes, son un equipo astuto y tremendamente difícil de vencer, Cincinnati, por ejemplo, ha tenido a los Steelers a su merced, a punto de dar la estocada final, pero digamos que son tontos, por no decir algo un poco más subido de tono, en su afán de no sólo ganar, sino lastimar, terminan echando a la basura todo lo que ganaron durante los primeros tres cuartos, los Bengals son liderados por un maleante llamado Vontaze Burfict, un auténtico forajido del emparrillado, en su momento se ha encargado de mandar a la enfermería a Big Ben, Le'Veon Bell y casi mata el desgraciado a Antonio Brown. Pero esta agresividad insensata a liquidado a los Bengalíes, muy diferente es el asunto con los Cuervos, son rudos, muy rudos, pero no tontos, John Harbaugh ha sabido controlarlos y encauzar el odio homicida que sienten por los Steelers en jugadas que hacen crujir los huesos, pero en la mayoría de las ocasiones dentro del reglamento.
Una buena noticia para Big Ben y su receptor estrella Antonio Brown es que Jimmy Smith el mejor esquinero de Baltimore estará fuera por segundo partido consecutivo, Smith se lesionó un tobillo en la semana catorce contra Patriotas, el que sí estará es un viejo conocido de la ofensiva de Pittsburgh el veterano Terrell Suggs que lidera a la defensiva de Cuervos con ocho capturas de Mariscal de Campo. Las armas ofensivas de Ravens son su quarterback Joe Flacco con 3,788 yardas, 19 touchdowns y 13 intercepciones tiene un porcentaje de pases completos del 64.6, su mejor corredor es Terrance West con 729 yardas en 178 acarreos, su mejor receptor un exacerero, Mike Wallace con 963 yardas por aire.
De los Steelers sabemos que estando sanos su tridente ofensivo (comparable en calidad e influencia al tridente del Barca, Messi-Neymar-Suárez) Ben Roethlisberger, Le'Veon Bell y Antonio Brown son tres futuros salones de la fama que están en condiciones de cargar con el peso de la ofensiva acerera contra la rocosa y muy agresiva defensa de los Cuervos, Baltimore es la mejor defensiva contra la carrera de la Conferencia Americana y segunda de La Liga, permiten un promedio de 82 yardas por juego, además es la quinta mejor defensiva en yardas totales de la NFL con 312.
Tremendo juego a las 3:30 de la tarde, súbanle a su tele porque así como se oía el crujir de huesos de Leonardo DiCaprio en la escalofriante escena del ataque de la osa en "The Revenant", así se van a oír a la hora de los impactos en cada jugada, cuando estos equipos que se odian, pero con odio jarocho diría el Ratón Crispín, colisionen en Pittsburgh con una temperatura de seis grados centígrados y nubes y Sol a intervalos. ¡Ay Güey! Se nos viene el juego más competitivo de la NFL, el que pierda sólo un milagro le evitará la eliminación, el que gane estará del otro lado. Después de la batalla de Pittsburgh, veremos la final entre Tigres y Águilas en el Uni, habrá que ver con que humor, si pierden mis Steelers (ni lo mande Chuck Noll) seré un pésimo acompañante para los seguidores de Tigres y América, pero si ganan, hasta ando pichando una bolsa de papas (de las importadas claro)
Feliz Navidad y recuerden, lo importante no es lo que está sobre la mesa, sino alrededor.
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