La ventana indiscreta de Xóchitl Gálvez

ARREPENTIDA DE SU IMPRUDENCIA…

Se dijo la jefa delegacional de Miguel Hidalgo en la ciudad de México, Xóchitl Gálvez, por transmitir y balconear de lo lindo, vía Periscope, a los convidados a la fiesta de 75 años de Diego Fernández de Cevallos. Hasta el mismo cumpleañero le enmendó la plana. Su dislate, sostuvo el “jefe” Diego, causó molestias a los invitados. “Era una reunión privada pero la señora Xóchitl Gálvez es muy inquieta y una reunión privada la hizo pública”, remató.

Qué no decir del escándalo que se ha suscitado entre el círculo rojo y ciertos sectores ciudadanos. Impetuosa e entusiasta, encarrerada, Gálvez hizo de un evento “íntimo” –es un decir pues coincidieron ahí cientos de personas- caldo de cultivo para lo público. Existen límites que no debemos cruzar, considero.

Ya nadie me va a invitar a las fiestas, dijo entre apenada y divertida la política de extracción panista. Quizá no llegue a tanto, pero sí le van a requerir el celular, presiento, o se la pensarán dos veces antes de llamarla. Basta con fijarse en la expresión de Carlos Slim, poco mediático y reacio a las cámaras, al saberse filmado.

Es Xóchitl, quien en lo personal me cae bien, efigie de la tía imprudente que toda familia mexicana tiene en su haber. Esa que nos pide posar para la foto cuando estamos comiendo; que quiere que contemos chistes en el momento más inoportuno; que pretende recitemos versos del concurso de oratoria que ganamos en primaria; que nos suplica, insistente, que saquemos a bailar a la chava poco simpática y agraciada con la que nadie quiere platicar.

Sirve el Periscope de Xóchitl Gálvez para los cotilleos y el chisme, y hasta ahí. Fernández de Cevallos, de amplia trayectoria y relaciones con casi todos los sectores de la vida nacional, puede convocar a sus fiestas a quien desee sin necesidad de explicación. Ya está grandecito el hombre y allá él con sus relaciones, peligrosas o no.

¿Que confluyeron actores políticos de diversas ideologías? Lógico, inmensa es la diversidad del país. ¿Que invitaron a Carlos Salinas de Gortari y coincidió con Felipe Calderón y hasta se saludaron? Bien. No habría motivo para otra cosa, necesaria la cortesía y urbanidad entre quienes han ocupado la más alta magistratura del país. ¿Que la secretaria general de Morena, Yeidckol Polevensky, se sentó en la misma mesa que Raúl Salinas e intercambiaron impresiones? ¿Eso va en demérito de Yeidckol o la hace socia de tan cuestionado personaje? No lo creo.

También estuvo Ciro Gómez Leyva, periodista muy influyente que a través de su columna ya emitió una postura al respecto. Porque en México, aceptémoslo, los poderes político, empresarial, artístico, cultural y eclesiástico, confluyen. Pero también habitamos en una sociedad que mal que bien todo cuestiona y saca de contexto. Percibimos lo que queremos percibir, vemos lo que queremos ver así, sin medias tintas. Hasta en eso estamos profundamente polarizados.

Fernández de Cevallos cumplió 75. Las explicaciones que deba dar son en el terreno de lo público, en su desempeño como abogado o político. De lo que haga en su casa, muy su rollo. Todos, no importando la actividad que desempeñemos, tenemos derecho a la privacidad.

Pero tal como lo retrata Alfred Hitchcock, siempre nos ha gustado mirar desde la ventana indiscreta. ¿Qué seríamos, especialmente los políticos, sin el chisme y los cotilleos?

Estuvieron los malosos en pleno, considera Andrés Manuel López Obrador, no sin un dejo de razón en casos específicos. Con su Periscope y quizá sin quererlo, Xóchitl Gálvez le dio al tabasqueño armas suficientes para insistir en su idea sobre la “mafia de poder”.

Saque cada quien sus conclusiones. ¿Las aves del mismo plumaje vuelan juntas o fue mera coincidencia de distintas parvadas? Linduras de la ventana indiscreta de la un tanto indiscreta Xóchitl Gálvez.

Nada que no supiéramos desde un principio. ¿O no?

Nos leemos en Twitter y nos vemos por Periscope, sin lugar a dudas: @patoloquasto