Tener una mascota significa muchas cosas. Por lo pronto, ayuda a combatir la soledad. Una mujer que por circunstancias de la vida se quedó soltera, o una viuda a la que se le casaron los hijos y se olvidaron de ella o se fueron a vivir a otro país, tener un perrito de mascota puede significar una manera de compensar la tristeza, brindándole un amor fiel y desinteresado.
La palabra mascota es de origen francés y se define como un animal que brinda compañía y que sirve como talismán, o sea, que atrae la buena suerte. En este último aspecto, tenemos ciertas dudas, porque a veces la mascota nos mete en una serie de complicaciones. De hecho, pocas veces, antes de adoptar o comprar una mascota, debemos hacernos conscientes de la gran responsabilidad que eso representa.
Cuando hablamos de mascotas, lo primero en lo que pensamos es en un perro, porque es un animal fiel y cariñoso por excelencia. Bueno, eso depende de la raza del perro que tengamos. Cuando son cachorritos, todos los perros son lindos y tiernos. Muchas veces se lo compramos al niño como regalo y el chamaco se pone feliz. Pero luego el cachorrito crece y se puede convertir en un animal incontrolable.
Además, el chamaco no tiene idea de todo lo que hay que hacer para acostumbrar al perro a hacer sus desahogos fisiológicos en el lugar adecuado y una serie de cosas que hay qué hacer para que el animalito sirva realmente para el propósito con el que se adquirió y no se convierta en una serie de problemas graves.
Otro animal que se adopta como mascota frecuentemente es el gato, aunque éste por lo general es más convenenciero. Mientras está a gusto se porta cariñoso, pero si no le agrada el ambiente, se desaparece.
También hay quien adopta como mascota a una rata, una serpiente o una tarántula. Incluso he conocido personas que tienen como mascota a un lagarto o a un tigrillo. En este tipo de casos, poco se puede esperar del animalito, ya que no está en su naturaleza comportarse como animal doméstico y salvo casos especiales, tenerlos en casa es un peligro porque no es su hábitat normal y tarde o temprano pueden reaccionar violentamente.
Entonces, antes de decidirse por una mascota, es recomendable investigar detenidamente lo que va a suceder cuando pase el tiempo y estar muy conscientes de lo que hay qué hacer para poder disfrutar su presencia sin problemas.
ESCRÍBALE A JUAN RECAREDO; SU CORREO ES comodijo2@hotmail.com.
PREGUNTA DEL PÚBLICO:
Luis Manuel Garza. ¿Cómo se dice, tengo sed o traigo sed?
RESPUESTA:
Lo común es tengo sed, pero decir traigo sed, gramaticalmente no representa error alguno.
Me retiro con esta reflexión. La guerra más difícil es la que se libra contra uno mismo. ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.
