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LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA

Una vieja costumbre

A veces, adoro la tecnología que nos facilita tanto las cosas y que, gracias a ella, ya no puedo imaginarme la vida, por ejemplo, sin computadora o sin teléfono celular, el famoso teléfono móvil, como le dicen los españoles, pero a veces la odio (a la tecnología) porque se ha llevado consigo tantas costumbres bellas y folclóricas que le daban otro sentido a nuestra vida.

En los tiempos actuales, si a un muchacho le gusta una chica y la quiere conquistar por la vía romántica, se le acerca y le dice ¿a qué hora sales al pan?, la chava no va a tener idea a qué se está refiriendo el muchacho y probablemente lo "tire a lucas", o sea, que no lo pele, como dicen los muchachos de ahora.

Es que a ellos, los chavos y las chavas de hoy, nadie les ha dicho que ese era un magnífico pretexto para iniciar una relación que podía terminar en un noviazgo, y quizá ¿por qué no?, en algo más profundo que los uniera para toda la vida hasta que la muerte los separase.

¿A qué horas sales al pan? ¿Cómo? No entiendo. ¿Te refieres a un partido político? La neta no te entiendo ni madre lo que me quieres decir.

Es que antiguamente era costumbre muy arraigada que a la joven o adolescente se le ordenara que a media tarde fuera a la panadería "La Colmena", que estaba a una cuadra o dos de su casa, a traer tres pesos de pan y que ella regresara con una inmensa bolsa de papel "de estraza" llena y rebosante de volcanes, morelianas, alamares, aviones, monjas, ojos de buey y quizá hasta unas yolandas y algunos calzones, porque, aunque parezca atrevido, había unas piezas de pan dulce riquísimas que llevaban el nombre de esa prenda íntima femenina.

Es triste pero muy cierto que la clásica panadería, donde se elaboraban también las campechanas, los cocoles y los bolillos, va quedando en el olvido y hasta su nombre que originalmente era tahona y que se refiere al molino en el que se producida la harina como materia básica, ya casi nadie lo conoce.

En los tiempos de ahora, es probable que un muchacho se refiera a una chica diciendo "que es un bizcochito", pero si se le preguntara qué es un bizcochito y por qué se llama así, quizá no tenga la menor idea sobre el concepto referido.

Habría que decirle que bizcocho se le llamaba originalmente a cierto tipo de pan, cuyo nombre viene del latín bis coctus, que significa "cocido dos veces", porque para que "agarrara" su mejor sabor se le cocía dos veces, y así quedaba como la chica… que realmente estaba como para comérsela.

ESCRÍBALE A JUAN RECAREDO: comodijo2@hotmail.com.

PREGUNTA DEL PÚBLICO:

Rogelio Mata: ¿Es verdad que la palabra histérico no puede usarse en masculino?

RESPUESTA:

Antiguamente, se consideraba que la palabra histeria y sus derivados sólo podían aplicarse a la mujer porque proviene del griego histeros, que es el útero o matriz, una víscera que sólo tiene el organismo femenino.

Me voy con esta reflexión: El matrimonio es la única sentencia a cadena perpetua que se suspende por mal comportamiento. ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.

Por: Juan Recaredo

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