Opción. Piden diversificar los mercados de exportación de la agroindustria mexicana, a fin de reducir la dependencia comercial.
El arribo de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos también afectará al campo mexicano si despliega medidas proteccionistas que restrinjan las exportaciones mexicanas, entre ellas, de productos agrícolas.
Durante la presentación del informe "Perspectivas agrícolas 2016-2025", elaborador por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en coedición con la Universidad Autónoma Chapingo, legisladores federales y especialistas expresaron su preocupación por el impacto en México de la política comercial y agroalimentaria de Estados Unidos.
"El comportamiento que tendrá el nuevo gobierno de Estados Unidos con el mundo obliga a todos a revisar las políticas públicas, el abasto interno y los mercados internacionales", dijo el diputado priista Julián Nazar Morales, presidente de la Comisión Especial del Café.
Con él coincidió el legislador Oswaldo Cházaro, también del PRI, quien consideró que México debe estar pendiente y listo para revisar lo más rápido posible las políticas públicas vinculadas a la producción alimentaria, que no son ajenas a acontecimientos políticos internacionales, como las elecciones en Estados Unidos y el "Brexit"en Reino Unido.
Está claro, dijo, que Estados Unidos ya no integrará el Acuerdo Estratégico TransPacífico de Asociación Económica (TPP), y esa decisión plantea un escenario comercial distinto al previsto hace algunos meses.
Por ello urgió a diversificar los mercados de exportación de la agroindustria mexicana, a fin de reducir la dependencia comercial con Estados Unidos, que concentra 80 % de las exportaciones mexicanas.
Frente a las perspectivas comerciales que se prevén con Trump, Abel Pérez, director general de la División de Ciencias Económico-Administrativas de la Universidad Autónoma Chapingo, propuso a los legisladores un cambio de estrategia económica, fortalecer el mercado interno y alentar una distribución salarial más equitativa.
El especialista recomendó no desatender el impacto de las decisiones adoptadas en Estados Unidos y China, como grandes compradores de productos agroalimentarios. También diversificar mercados en América Latina, Oriente, Rusia y la Unión Europea para revertir la dependencia de México con Estados Unidos, y aumentar los salarios, sobre todo ahora que Trump amenaza con deportar a millones de mexicanos que viven en Estados Unidos.
El diputado priista Germán Escobar, presidente de la Comisión de Agricultura y Sistemas de Riego, aceptó que el campo necesita una modernización integral. Un avance, dijo, fue el aumento de recursos aprobado en el Presupuesto de Egresos 2017, con el propósito de alentar la agricultura por contrato que produce más de 20 millones de toneladas de alimentos, sin desatender a los pequeños productores, de los cuales 190 mil serán incorporados a programas especiales de apoyo para elevar la siembra de maíz y frijol, particularmente, y rescatar la cafeticultura.
El legislador dijo que es necesario fortalecer y recuperar la producción nacional de alimentos para reducir las importaciones y equilibrar las cadenas productivas, de distribución y abasto.
"Se busca apoyar a todos los productores para erradicar los desequilibrios en la cadena agroalimentaria, como el rezago en los precios que se pagan a los agricultores, los cuales son muy bajos frente a los costos en que se ofrecen los alimentos a los consumidores finales, que aumentan el doble o triple", dijo.
Su mercado
Se esperan varias modificaciones:
El alza del dólar inclinó a favor la balanza comercial del campo mexicano, que exporta 80 % de su producción a Estados Unidos.
El año pasado el país tuvo ingresos por 12,858 millones de dólares (mdd), por concepto de las exportaciones agropecuarias. En comparación, las importaciones sumaron 11,241 mdd. Esto es un saldo a favor de 1,616 mdd en la balanza comercial agropecuaria.
No obstante, las exportaciones agropecuarias representan sólo 3.4 % del total de los bienes y productos que México comercia en el exterior.